Hablar de Bolivia, con una taza de café

¿Es viable una convergencia de la República y el Estado Plurinacional?

9 NOV
Mario Machicado (izq) y Paul Coca (der.) participan de la entrevista organizada por ANF: Foto: Claudia Morales/ANF
9 de Noviembre, 2020

Al ser consultados sobre los derechos de quienes no son indígenas, Machicado subrayó que un debate necesario es la elección de autoridades de líderes políticos con doble nacionalidad porque, según dijo, no tendrían la misma vocación de trabajo y amor por Bolivia y llegado el momento optarían por defender su otra nacionalidad. Al respecto, Coca recordó que la Constitución precisamente protege contra toda forma de discriminación y reivindicó que una parte de la población en las ciudades se reconoce como mestiza, que no se identifica con los indígenas, ni con los sectores denominados interculturales.


Por Javier Aliaga

La Paz, 9 de noviembre (ANF).- La República, fundada en 1825, y el Estado Plurinacional, creado en 2009 con la nueva Constitución de Bolivia, conviven con sus formas, estructuras, conceptos y símbolos. No obstante, en nuestra reciente historia, un sector de la sociedad ha reivindicado la República y otro sector, al Estado Plurinacional, señalándolos como proyectos antagónicos.

El politólogo y exconstituyente Mario Machicado y el abogado y analista político Paul Coca hablaron de estos temas en un diálogo celebrado como parte del programa “Hablar de Bolivia con una taza de café”, que realiza la Agencia de Noticias Fides (ANF) y difunde en todas sus plataformas.

Machicado comenzó subrayando que hay dos visiones de Bolivia que se mantienen desde la colonia, heredadas en la República y vigentes en el Estado Plurinacional y están relacionadas con problemas no resueltos como la participación política de los indígenas “que se ha truncado”, el desarrollo de sus culturas, la distribución de las tierras y el rol que debe jugar el Estado en la redistribución de la riqueza para la población.

Para Machicado, la Constituyente (2006-2007) no pudo resolver los problemas planteados porque muchos de sus objetivos quedaron limitados por el sistema de votación de los dos tercios, un tema concreto que ha vuelto a reflotar actualmente en las discusiones de la nueva Asamblea Legislativa y en las recientes protestas regionales.

A su juicio, los pueblos indígenas y las organizaciones sociales tienen ahora, con la elección de Luis Arce como presidente, y de David Choquehuanca, como vicepresidente, una nueva oportunidad para plantear la reconducción del “proceso de cambio” con sus demandas que serán parte de la agenda política nacional del nuevo gobierno.

A su turno, Coca subrayó que cuando en octubre y noviembre del 2019 se produjo “la revuelta popular y la caída de Evo Morales” muchos vieron una oportunidad para desmontar el Estado Plurinacional creyendo que era una idea sin asidero en la realidad, aunque “ya es algo que está enraizado en el gran grueso de la población boliviana”.

En ese sentido, Coca recordó que la propia presidenta transitoria Jeanine Añez reivindicó la República durante su fallida campaña electoral y hubo policías que cortaron la whiphala del emblema de sus uniformes durante la crisis política del 2019.

El debate ahora debería ser: “¿Cómo hacemos para unificar el Estado Plurinacional y el sistema republicano?”, apuntó el analista, para quien contraponer el republicanismo y el estado plurinacional es un “falso” debate.

Varias instituciones republicanas estás vigentes y la Carta Magna promulgada por Evo Morales en 2009 para crear el Estado Plurinacional, reza en su artículo 11 que la “República de Bolivia adopta para su gobierno la forma democrática, participativa, representativa y comunitaria con equivalencia de condiciones entre hombres y mujeres”, agregó.

Autonomías tuteladas por el sistema centralista

Aparte, Coca cuestionó que las autonomías creadas en el Estado Plurinacional, sobre todo las autonomías indígenas originarias campesinas, sean “tuteladas” y estén supeditadas a la “visión centralista que hemos heredado desde la época colonial”, de tal forma que la Carta Magna no está permitiendo profundizar la descentralización.

Enfatizó que el éxito de una verdadera descentralización es la transferencia de recursos económicos y de poderes, sin necesidad de que cualquier decisión o proceso regional municipal o de los pueblos indígenas pase por el centralismo de la sede del Gobierno.

“La idea del estado plurinacional descentralizado y con autonomías es espectacular, pero uno de los aspectos que precisamente no está arrancado es precisamente ese, el tema de la autonomía real y verdadera, que no existe, sino que está tutelada”, sostuvo.

Machicado sostuvo que el Estado Plurinacional no tiene retorno a la época republicana y aunque estén vigentes varias instituciones de la República, las mismas tienen una orientación que, según dijo, ya no beneficia a un solo sector social, sino a varios.

Para el exconstituyente, en el marco de la Constitución, los pueblos indígenas tienen actualmente derecho a elegir a sus representantes y pueden constituirse en gobiernos municipales con carácter indígena originarios campesinos, pero todavía pueden avanzar más hasta consolidar su propio desarrollo al amparo de la Carta Magna.

Al contrario, Coca comentó que la misma Constitución establece un paraguas que impide a los pueblos indígenas ir más allá en sus estatutos como, según dijo, pasó en el caso del gobierno de Charagua Iyambae al que impuso limitaciones el Tribunal Constitucional.

El problema, según el jurista, es que la Constitución destaca por la ampliación de derechos para los pueblos indígenas, pero no tienen forma de efectivizarse.

Al ser consultados sobre los derechos de quienes no son indígenas, Machicado subrayó que un debate necesario es la elección de autoridades de líderes políticos con doble nacionalidad porque, según dijo, no tendrían la misma vocación de trabajo y amor por Bolivia y llegado el momento optarían por defender su otra nacionalidad.

Al respecto, Coca recordó que la Constitución precisamente protege contra toda forma de discriminación y reivindicó que una parte de la población en las ciudades se reconoce como mestiza, que no se identifica con los indígenas, ni con los sectores denominados interculturales.

“El mestizo, el que vive en las ciudades, no puede desconocer la Bolivia plurinacional y esta Bolivia plurinacional no puede desconocer la existencia del mestizo”, dijo Coca al abogar por “cerrar heridas” y pensar en la viabilidad de un proyecto común con vistas al bicentenario de la fundación de Bolivia en 2025.

Para concluir, Machicado insistió en la causa que “impide unificar visiones diferentes en una sola visión son los intereses regionalistas”, pero convino en que el país debe apostar por un solo proyecto, lo que implicaría “deponer intereses radicales” y hacer concesiones para lograr la unidad en Bolivia.

“Eso es lo más importante, y eso es lo que no ha habido desde la República”, concluyó.

///ANF


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