La Paz, 17 de junio de 2024 (ANF).- Los gremiales que hace seis días partieron en una marcha desde Patacamaya llegaron este lunes a la ciudad de La Paz, un ampliado determinará las nuevas medidas de presión en contra de la asfixia del Gobierno a este sector y a los emprendedores.
El máximo dirigente César Gonzales protestó que, a seis días de su marcha, el gobierno de Luis Arce no los llamó para instalar el diálogo en torno a su pliego petitorio, respecto a la abrogación del decreto 4732, de la resolución normativa sin directorio 102111 sobre la facturación electrónica.
Asimismo, exigieron la destitución del presidente del Servicio de Impuestos Nacionales (SIN), Mario Cazón; al igual que la destitución de la presidenta de la Aduana Nacional, Karina Serrudo. “Mario Cazón es un experto para hacer quebrar emprendimientos, excepto con la gente que da plata”, denunció Gonzales.
En rechazo al método de facturación electrónica cree que se va a convertir en una “fábrica de multas” para hacer caer los negocios, que además no son un obstáculo para el Estado, porque son emprendedores, generan empleo, trabajan 10 o 12 horas al día”, afirmó.
Gonzales dijo que la única forma debilitar a esta movilización es sembrando pruebas a sus líderes, porque no pretenden levantar las medidas de presión.
“Mucha asfixia al que invierte en el país, al emprendedor, al autogestionario, al gremial al trabajador por cuenta propia. No tenemos seguridad social, no tenemos seguro de salud. Nosotros con un capital de 1.000 bolivianos hacemos crecer”, sostuvo.
Protestó contra quienes viven del Estado como el máximo dirigente de la Central Obrera Boliviana (COB) que percibe un sueldo -dijo- de Bs 30.000. “Solo gobierna para un partido político, para dirigentes sumisos, traidores y para los funcionarios, pero el pueblo está olvidado y abandonado”.
El dirigente protestó porque hasta el mediodía de este lunes ninguna autoridad los había convocado para dialogar, rechazó la exigencia de que se afilien a la COB porque “nosotros no somos obreros, no somos asalariados, pero somos la mayoría” de acuerdo a los datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
“Por cada asalariado nosotros somos ocho”, sostuvo Gonzales en declaraciones a los medios de comunicación y al anunciar que en un ampliado decidirán las próximas medidas de presión.
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