
La Paz, 20 de marzo de 2025 (ANF).- Un informe publicado por el Observatorio Boliviano de Seguridad Ciudadana y Lucha Contra las Drogas (OBSCD) reveló que Bolivia experimentó una ligera disminución en los delitos de alta connotación social durante el año 2024. Según el boletín Nº 8, las denuncias por estos delitos pasaron de 80.512 en 2023 a 78.956 en 2024, lo que representa una reducción del 1,93%. Este es el primer descenso registrado en los últimos cinco años, marcando un cambio en la tendencia al alza que se venía observando desde 2020.
El informe destaca que la violencia familiar sigue siendo el delito más denunciado, representando el 43,09% del total de casos. Este tipo de violencia incluye agresiones físicas, psicológicas y económicas, y afecta principalmente a mujeres y niños. A pesar de los esfuerzos por combatir este flagelo, las cifras indican que sigue siendo un problema grave en el país.
Los delitos contra la propiedad, como robos de vehículos y motocicletas, ocupan el segundo lugar en el ranking de denuncias, con un 21,97% del total. Le siguen los delitos contra las personas (15,27%) y los delitos contra la libertad sexual (12,28%), que incluyen violaciones y abusos sexuales. Estos datos reflejan la complejidad de la seguridad ciudadana en Bolivia, donde coexisten múltiples formas de violencia.
Por departamentos, Santa Cruz lidera la lista con el mayor número de denuncias, seguido de La Paz y Cochabamba. Estas tres regiones concentran más del 60% de los casos reportados a nivel nacional. En contraste, departamentos como Pando y Beni registran cifras significativamente más bajas, lo que sugiere diferencias regionales en la incidencia delictiva.
El informe también analiza la distribución de las denuncias por género, revelando que las mujeres son las principales víctimas de los delitos de alta connotación social, especialmente en casos de violencia familiar y delitos contra la libertad sexual. En cambio, los hombres son más propensos a ser víctimas de delitos contra la propiedad y delitos relacionados con armas de fuego.
En cuanto a la edad de las víctimas, el grupo más afectado es el de personas entre 18 y 30 años, seguido por menores de 18 años. Esto indica que la población joven es particularmente vulnerable a la violencia y la delincuencia en Bolivia. Además, se observa un incremento en las denuncias relacionadas con trata de personas y tráfico de personas, aunque estos delitos representan solo el 1,08% del total.
El mes de diciembre de 2024 registró un aumento del 3,14% en las denuncias en comparación con noviembre del mismo año, aunque hubo una disminución del 8,96% respecto a diciembre de 2023. Este dato sugiere que, si bien hay una tendencia a la baja en el año, los últimos meses del año suelen ser críticos en términos de seguridad.
El OBSCD resalta que, a pesar de la leve mejora en las cifras, los delitos de alta connotación social siguen siendo un desafío importante para las autoridades. La violencia familiar, en particular, requiere de políticas públicas más efectivas y de una mayor sensibilización de la sociedad para prevenir y erradicar este tipo de abusos.
Este boletín, que forma parte de las actividades del Bicentenario de Bolivia, busca ofrecer una perspectiva clara de la situación de seguridad en el país y contribuir a la toma de decisiones informadas por parte de las autoridades y la sociedad civil.
/ANF/
Articulo sin comentarios