La Paz, 1 de diciembre de 2024 (ANF). - Tras el nuevo desborde del río Pasajahuira, se desplegó a 600 militares en Bajo Llojeta para apoyar en los trabajos de mitigación y recojo del material de arrastre que quedó en las vías. A la vez, advirtieron que los terrenos de ese sector son inestables.
“Son más de 600 militares de las tres fuerzas que han llegado a este sector. Hemos hecho entrega de equipo de protección personal, herramientas para que los vecinos puedan hacer la limpieza de su zona y siete toneladas de ayuda humanitaria”, informó el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes.
El sábado por la noche se desbordó el río Pasajahuira por segunda ocasión y provocó que se activen las alertas ante una nueva amenaza de que el lodo ingrese a las viviendas. Ese hecho ocurrió una semana después de la mazamorra que anegó a más de 40 casas y causó la muerte de una menor de cinco años.
A la vez, Calvimontes dijo que el terreno de ese sector es inestable y las viviendas que se encuentran cerca a la avenida de Los Sargentos están en riesgo, por eso consideró que es necesario agilizar los trabajos de contención para evitar que el afluente se desborde otra vez.
“Las viviendas obviamente que están en riesgo absolutamente, todas las viviendas que están en la zona. Es una zona completamente inestable. Anoche se ha puesto en riesgo aquellas viviendas de enfrente por la fuerza del agua que ha caído, por eso es que están haciendo esos trabajos de contención para protegerlo en caso de que tengamos un segundo evento”, declaró.
Ausencia
Por otra parte, la autoridad lamentó la ausencia del gobernador de La Paz, Santos Quispe, y la Alcaldía de Achocalla para apoyar en los trabajos de contención y buscar una salida que beneficie a los vecinos.
“La ausencia de la Gobernación, no hay la gobernación en la zona, debería estar presente el gobernador por un acto de solidaridad y buscar soluciones estructurales; el alcalde de Achocalla ha desaparecido. Lo que está sucediendo es grave y si sucede un nuevo desborde de este caudal afectará a las viviendas que están en la avenida Los Sargentos”, manifestó.
En ese contexto, también indicó que la mayor parte de los vecinos no cuentan con los documentos de los terrenos y consideró que fueron estafados. Incluso los vecinos denunciaron que fueron amenazados por el loteador con sacarlos de ese lugar, porque tiene previsto realizar un nuevo asentamiento una vez que se estabilice la zona.
“Ha aparecido el loteador y habría amenazado a los vecinos que, como ninguno tiene papeles, el loteador tiene proyectos de nuevos asentamientos una vez que el lugar se logre estabilizar. Lo que nos preocupa son esos temas estructurales, alguien debe poner en orden esa situación”, puntualizó.
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