La Paz, 27 de septiembre de 2024 (ANF).- Para Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) “no es un problema en ninguna medida” y “no tiene ningún efecto” el fin del contrato con Enarsa-Argentina, porque estaba previsto que finalice antes de 2026, y porque el gas boliviano tiene “mercado asegurado” en Brasil, aseguran las máximas autoridades de la estatal petrolera.
“Sabíamos que el contrato de exportación de gas suscrito con Enarsa iba a finalizar antes de 2026, plazo original del contrato. En ese marco, en los últimos años se ha trabajado conjuntamente ENARSA, para ir viendo cómo iba a ser esta transición. Se vio que el 2024 era el año en el que se iba a ver este cambio de flujo, este cambio en la demanda. Para nosotros no es un problema en ninguna medida porque este gas tiene mercado asegurado en Brasil, un país ávido de energía”, Óscar Claros, gerente de Contratos de Exportación de Gas Natural de YPFB.
Explicó que los trabajos de descubrimiento y desarrollo en la formación Vaca Muerta (Cuenca Neuquina) datan de hace más de diez años, por lo tanto, desde ese momento se sabía que Argentina se proyectaba como un país productor de clase mundial, dijo a propósito de que Argentina dejó de importar gas de Bolivia.
Desde el 18 de septiembre pasado, Enarsa dejó de nominar gas natural de Bolivia, según YPFB debido al ingreso al verano de forma anticipada, provisión de cargamentos de GNL y culminación de algunos tramos en el proyecto de reversión del sistema de transporte de gas y la producción de gas en el norte argentino.
El presidente de la estatal petrolera, Armin Dorgathen, minimizó el fin de la exportación de gas a ese país, al ser consultado sobre si este escenario registrará algún efecto negativo, dijo que “no tiene ningún efecto, porque el mismo gas que vendíamos a Argentina se vende a distintos clientes en Brasil, a buenos precios”.
Añadió que el volumen exportable de gas natural que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos comercializaba a la empresa Energía Argentina S.A. (Enarsa), será enviado a nuevos clientes de la República Federativa del Brasil a precios competitivos.
“Brasil presenta una demanda insatisfecha muy grande, y considera a YPFB como un suministrador confiable y seguro. Por otro lado, tenemos firmados algunos contratos en firme y otros con suministros interrumpibles. Incluso ya hemos firmado contratos con otros clientes para este último trimestre y estamos negociando otros contratos para el período 2025 al 2027. Los titulares de los contratos de operación en Bolivia tienen que estar tranquilos porque ellos tienen conocimiento sobre estas negociaciones”, declaró según una nota de prensa de esa entidad.
Mientras YPFB muestra una aparente tranquilidad en torno al tema, analistas y expresidentes han expresado su preocupación al respecto por lo que vaya a representar para la economía del país.
El expresidente de Bolivia Jorge Tuto Quiroga criticó la política hidrocarburífera del gobierno del MAS porque “Durante 6 décadas #Bolivia exportó gas y obtuvo muchos $us de #Argentina. MAS recibió mucho gas, ductos, contratos e IDH; ahora nos dejan sin gas, ni dólares, ni mercado ARG. 2025 debemos resucitar gas, salvar mercado #Brasil, abastecer al interno e industrializar de verdad”.
El gobierno del MAS tuvo en sus manos el destino de los hidrocarburos durante casi 18 años, 14 años bajo la conducción de Evo Morales, periodo en el que Luis Arce fue su ministro de Economía, y casi cuatro años bajo la responsabilidad de Arce como presidente del Estado.
Por su parte, el expresidente Carlos Mesa en relación a la conclusión del convenio de venta de gas con la Argentina dijo que se inició en 1972 y que fue ampliado en su gobierno a una exportación de 27 millones de metros cúbicos por día. Sin embargo, calificó de ineptos a los gobiernos de Morales y Arce en relación al fracaso de este proyecto.
“La desidia e ineptitud de los gobiernos de Evo Morales y Luis Arce hicieron fracasar un proyecto millonario que sustentó el crecimiento nacional por décadas y pudo haber aportado a la reconstrucción de la economía tras la crisis. Pocas veces un partido político fue tan negativo para nuestra economía y dilapidó tanto las riquezas nacionales que administró”, afirmó.
Claros sostuvo que el precio que pagaba Enarsa era algo mayor que el precio que pagaba Petrobras de Brasil, pero que hubo una desregulación del mercado gasífero brasileño, lo que ha permitido que entren nuevos actores a competir en la industria del gas. “Por lo tanto, nosotros como YPFB hemos diversificado nuestra cartera y ahora tenemos alrededor de ocho a diez clientes distintos para suministrar el gas natural en Brasil”, explicó.
La novena y última adenda al contrato de compra venta de gas natural suscrito entre YPFB y Enarsa indica que el 30 de septiembre de este año concluye la obligación que tiene YPFB de suministrar gas natural hacia el mercado argentino.
/NVG/
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