La Paz, 17 de agosto de 2024 (ANF).- El acuerdo firmado ayer entre el gobierno nacional y el sector empresarial del país, establece medidas más de mediano y largo plazo en áreas de inversiones, comercio exterior, hidrocarburos, y otros. Las políticas estructurales, al menos las fiscales, "brillaron" por su ausencia, evaluó el analista económico, Luis Fernando Romero.
“Mas paja que trigo, sería una buena definición de este acuerdo, ya que se tenían muchas expectativas, las cuales no fueron colmadas ni para los sectores firmantes y menos para la población en general. Estas medidas, no son una respuesta clara y oportuna para las demandas de nuestra economía en cuanto al desabastecimiento de carburantes, escasez de dólares y una perdida notaria del poder adquisitivo de nuestra moneda”, señaló.
Dijo que está de acuerdo, con las declaraciones del presidente de los empresarios al finalizar la reunión, “lo peor hubiera sido no hacer nada”.
“Este convenio da una sensación de poco, donde ambos sectores cuidaron sus espaldas y velaron por sus intereses, pero no así del ciudadano común, era de esperarse. Ahora, inclusive el sector privado tendrá que hacer una presión (gestión) para que la Asamblea apruebe créditos externos, que será el flujo de divisas que ellos tanto necesitan”, sostuvo.
Indicó además que problemas cotidianos, como el incremento de precios de los productos de la canasta familiar, no fueron contemplados.
“Algo que es seguro, es que cuando vayamos al mercado o la feria a comprar nuestros tan necesarios productos, las caseritas no se fijaran en rostros o cargos, si eres gobernante o gobernado, empresario o fabril, igual te venderán al mismo precio, uno que semana a semana está subiendo más, porque hasta ahora no se tomaron las acciones pertinentes. Solo se dio oxígeno al gobierno y una palmada en la espalda a los empresarios”, destacó.
Según Romero, lo positivo es que hubo “diálogo” y un “acuerdo” entre públicos y privados. Lo “negativo”, la población no encontró las soluciones esperadas, así que tendrá que seguir ajustándose los “cinturones”.
/ERA
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