La Paz, 20 de diciembre de 2023 (ANF). - En este año se registraron al menos cinco problemas en la economía del país, que según expertos evidencia la decadencia del modelo económico del Movimiento al Socialismo (MAS), pasando por la caída de las Reservas Internacionales Netas (RIN), la escasez de divisas norteamericanas hasta la “descomunal” subvención a los hidrocarburos.
Al respecto, el economista Jaime Dunn dijo que la crisis que está atravesando el país es el resultado de los últimos ocho años de la caída de la producción de gas, principales ingresos económico a las arcas del Estado. Lamentó que en ese tiempo el gobierno no haya implementado ninguna política para cambiar el modelo económico y evitar estos acontecimientos.
“Las crisis económicas no suceden de un día para otro, son eventos que se van produciendo en el tiempo, lo que tenemos en el 2023 es justamente el resultado de ocho años desde que la economía perdió su principal fuente de ingreso, la venta de gas a Brasil y Argentina, perdió a los principales mercados que eran más de 6.000 millones de dólares en 2014 y ahora ha bajado a 2.000 millones de dólares. Hubo ocho años para tomar decisiones y hacer cambios profundos, redimensionar la economía, pero el enamoramiento del Gobierno al modelo económico y la negación sobre la realidad económica es lo que han hecho que el 2023 ha sido el año de una especie de una aceptación del camino a la crisis”, explicó el experto.
El presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero, detalló otros parámetros que también son preocupantes, por ejemplo, se ha incrementado el comercio informal que alcanza al 80%. El crecimiento económico previsto inicialmente era del 4,86%, pero solo se logró el 2,21% al segundo trimestre de 2023.
Detalló que el crecimiento de la deuda pública, en el caso de la deuda externa alcanza a los $us 13.422,9 millones, mientras que la interna llega a $us 24.311,62 millones que representa casi al 80% del Producto Interno Bruto (PIB) del año 2022, que fue de $us 44.315 millones. A eso falta sumar la deuda del gobierno nacional y de las empresas públicas.
Reservas internacionales
El último reporte que emitió el Banco Central de Bolivia (BCB) el 6 de diciembre establece que las Reservas Internacional Netas (RIN) alcanzan a $us 2.147 millones hasta el 31 de agosto de 2023. Esa cifra significó una caída de 3,1% respecto a los $us 3.976 millones reportados al 31 de diciembre de 2022.
La composición de las RIN se conforma así: oro que llega a $us 1.629 millones, divisas a $us 437,9 millones y Derechos Especiales de Giro (DEG) de $us 45 millones y tramo de reservas del Fondo Monetario Internacional (FMI) que es de $us 34,7 millones.
“Se ha visto que ha habido una tendencia continua de caída en el componente de divisas, estas reservas se han usado para cubrir el gasto público, para importar y financiar proyectos sociales, entonces no ha habido otro mecanismo de restituir todo lo que se ha gastado, eso puede generar una crisis de balance de pagos”, afirmó Romero.
No hay dólares
Desde el 9 de marzo de este año se registró una escasez de la divisa norteamericana y hasta el momento es difícil encontrar la moneda en los bancos, incluso en el mercado negro su cotización llegó a Bs 7,70 por dólar.
En ese sentido, Dunn dijo que es una muestra que este 2023 se ha notado una pérdida muy importante de las libertades de los ciudadanos bolivianos, en el sentido de que si tenían depósitos en dólares no les devolvieron en la misma moneda, sino que tuvieron que ser cambiados a bolivianos. Consideró que es un quebranto de la libertad sobre el patrimonio.
Subvención hidrocarburos
Entre agosto y noviembre de este año, el gobierno admitió en dos oportunidades los costos altos que significan la subvención de los hidrocarburos. El más reciente fue el 27 de noviembre, cuando el presidente Luis Arce dijo que Bolivia paga un precio “descomunal” por la importación de combustibles, atribuyendo el incremento de precios a los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania.
A eso se suma que a finales de septiembre se mostró una evidente escasez de diésel y gasolina en los surtidores del país, esto debido a diferentes problemas, sobre todo, por la falta de pago a los importadores. Aunque el Gobierno insistió que la distribución era normal, acusando a las especulaciones que se produjeron en redes sociales y medios de comunicación.
En ese aspecto, Dunn consideró que el principal problema económico del país a corto plazo es la importación de combustible y el subsidio. Aseguró que esa situación refleja el fracaso de la nacionalización.
Para Romero, lo que también causa daño es que la subvención de los carburantes beneficia a actividades económicas ilícitas, principalmente las de narcotráfico y a la actividad minera aurífera que consumen un carburante barato, no hay un aporte al país y dañan el medio ambiente.
Proyección
Dunn advirtió que el país se está encaminando a una situación bastante compleja y será necesario que el Gobierno reduzca los gastos públicos, la subvención y la importación de hidrocarburos.
Sin embargo, el gobierno se ha negado a admitir los problemas económicos que el país ha enfrentado este año. Es más, el ministro de Planificación del Desarrollo, Sergio Cusicanqui, dijo que no hay crisis, solo con base en el dato de la inflación.
En tanto que, el presidente del Estado, Luis Arce, atribuye a un boicot de actores políticos de “izquierda” a la economía del país. “No entendemos que nos boicoteen la economía; no entendemos que haya gente que se dice (ser) de izquierda y está boicoteando la economía, que es para las bolivianas y los bolivianos”.
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