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Cuidado de la casa común

Al menos 18 graves consecuencias que afectan a Bolivia por las quemas indiscriminadas y la sequía

Hasta ayer, en diez municipios del país continuaban los incendios. En La Paz aún son seis, en Beni son dos y en Santa Cruz también son dos, informó el Gobierno.
29 de octubre, 2023 - 11:15
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Los incendios amenazan al Parque Nacional Madidi. Foto: Alcaldía de San Buenaventura.
Los incendios amenazan al Parque Nacional Madidi. Foto: Alcaldía de San Buenaventura.

La Paz, 29 de octubre de 2023 (ANF).- Bolivia ha sufrido semanas de agobio a causa de los incendios y sequía. Los incendios se registraron principalmente en los departamentos de La Paz, Santa Cruz y Beni; y las sequías, en la región altiplánica y parte de los valles, según fuentes oficiales. De continuar con esta actividad dañina, las consecuencias de ambas afectaciones serán graves para el país.

El último reporte del Ministerio de Defensa da cuenta que los incendios se redujeron a tres activos. Tres municipios del departamento de La Paz son los que mantienen los incendios, Mapiri, Palos Blancos y Teoponte, mientras que los departamentos de Santa Cruz, Cochabamba y Beni están libres de quemas, informó el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes.

De acuerdo a su informe del 26 de octubre, en el departamento paceño se concentró la mayor cantidad de quemas, específicamente en los municipios antes mencionados además de Guanay, Apolo, Alto Beni y San Buenaventura.

“Cada año se suma más. El año pasado hemos empezado a recibir humareda. Hay una práctica común, la gente no ve la gravedad del asunto”; dijo ANF Adriana Rico, directora del Instituto de Biología de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA).

Un informe de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques (ABT) dio a conocer que la superficie quemada en el país en este año equivale a 2.012.252 hectáreas (ha) –una ha equivale a 10.000 m2-, siendo el año más desastroso en 2019, con un poco más de cinco millones.

La superficie afectada fue 23% en bosque y 77% en no bosque, es decir en sabanas y áreas agropecuarias. Beni ya perdió 1.381.124 ha (69%); Santa Cruz, 355.795 ha (18%); La Paz, 199.003 ha (10%); Cochabamba, 43.383 ha (2%); Pando, 25.909 ha (1%); Tarija, 3.124 ha (0,2%); Chuquisaca, 2.413 ha (0,1%); Potosí, 861 ha (0,04%); y Oruro, 639 ha (0,03%).

Debido a estas afectaciones en Mapiri, La Paz, los pobladores declararon paro cívico de dos días con cierre de trancas pues reclamaron que cese el fuego debido a la contaminación del aire.

En la página de Facebook “Mapiri, solo información” se dio a conocer que “personas comprometidas con el medio ambiente” partieron a apagar los focos de incendio que continúan en el sector denominado Chocopani; asimismo, la comunidad de Viliqui ayudó en la sofocación con vehículos que trasladaban agua, “los afiliados del Sindicato de Transporte de Toritos Patiti, la zona 3 y la zona 5 se hicieron presentes para ir a apagar los incendios que aún continúan en Chocopani”, se lee en esta cuenta.

En San Buenaventura, la unidad de bomberos, militares y la población en general realizó un arduo trabajo y luchó sin tregua para frenar los incendios principalmente registrados en Tumupasa. La Gobernación paceña informó que algunas aves, lagartos y un oso perezoso fallecieron calcinados en su intento de escapar de las llamas.

Los pobladores en Yucumo instalaron un bloqueo el viernes 27 en la carretera principal, que este sábado en horas de la noche declararon un cuarto intermedio, en demanda de que el gobierno departamental atienda al sector, pues aseguran que ya se declararon en emergencia por sequía e incendios y no llegó ninguna ayuda. “Ministro Novillo (de Defensa) el pueblo está ardiendo”, gritaban en coro.

¿Cuáles son los daños y las consecuencias?

De acuerdo con Rico, los daños que deja la quema de los bosques van más allá de la salud y de ordenar el uso de barbijo o quedarse en casa, las afectaciones son en cadena y son irreversibles.

Entre los perjuicios están: se acelera el proceso de calentamiento global (1), se acelera el proceso de deforestación (2), se reduce la superficie vegetal que amortigua la humedad (3), se derriten los glaciares y las montañas nevadas que nos proveen de agua en el país (4), se destrozan los bofedales (humedales) y se destruyen las áreas protegidas (6). 

“Es una reacción en cadena, se le llama punto de no retornó. Una vez que rebasemos eso , no hay vuelta atrás. Los niveles de glaciares se están derritiendo, ya no hay reservorios de agua, los bofedales se destrozan para ampliar la mancha urbana, para sacar turba, para el pasto de ganado o para agricultura. No es solo decir: nos duelen los ojos y nos estamos contaminando los pulmones. Bolivia, para la superficie que tiene es un país con muy poca gente, aún así es uno de los países más altos per cápita en deforestar”; enfatizó la bióloga.

¿Por qué la gente chaquea? Por el desbroce, que consiste en extraer y retirar de las zonas designadas todos los árboles, tocones, plantas, maleza, broza, maderas caídas, escombros, basura o cualquier otro material indeseable para volver a producir en el mismo, porque un terreno quemado aporta nutrientes a los nuevos cultivos, por menor carga de trabajo para no hacerlo a mano y porque la habilitación de tierras para su producción se haría de forma más rápida, según la ABT.

El 25 de este mes, en Santa Cruz, el Ministerio de Salud informó que la calidad del aire era extremadamente mala en Santa Cruz, tanto que la humareda oscureció la ciudad de día. La contaminación fue tal que sobrepasó la barrera de los 300 microgramos por metro cúbico (es decir, la cantidad de contaminantes suspendidos en el aire) de partículas en el aire.

Dos días después, la Secretaría Municipal de Medio Ambiente, del Gobierno Municipal de esa ciudad, aseguró que, gracias a las precipitaciones, bajó el Índice de Calidad de Aire (ICA) hasta un rango bajo considerable, hasta en un 44.

En La Paz, los niveles de contaminación de octubre se incrementaron entre 8 y 10 veces más en comparación a un “día limpio”, según un informe del Laboratorio de Física de la Atmósfera (LFA) de la UMSA.

“Equipos de medida desplegados en tres puntos de la ciudad de La Paz muestran que los niveles de contaminación de partículas en suspensión en el aire se han incrementado (en octubre) entre 8 y 10 veces respecto de un día limpio como fue el Día del Peatón, realizado el 3 de septiembre pasado”, señala dicho informe.

El informe también reporta que se daña la salud de las personas, de los animales y la agricultura (7). En la salud porque inhalar estas partículas afecta el sistema respiratorio y la salud en general.

Los incendios también inhiben procesos relacionados con las lluvias (8). “Cuando hay un exceso de partículas (aerosoles producidas por las quemas), las gotas no llegan a crecer lo suficiente como para producir lluvia. Esto implica que, aún con condiciones favorables para que tengamos precipitación, la presencia de humo en los niveles de estos días evitan las lluvias”.

Otra consecuencia es la humedad que se ve afectada por la deforestación (9). La humedad es transportada por las corrientes de vientos y es capaz de producir precipitaciones. El LFA alertó que este proceso se ha ido debilitando en los últimos años.

“El desastre ambiental que estamos viviendo debería servir como una severa llamada de atención para que autoridades de todos los niveles, pero también quienes habitamos Bolivia, planteen cambios profundos en acciones porque en los últimos años nuestro medio ambiente se ha deteriorado notablemente”, indica el boletín del LFA.

De acuerdo a la ABT otros impactos de los incendios son el impacto paisajístico porque se produce pérdida de la calidad paisajística por la destrucción (10), la pérdida de la productividad por los procesos de erosión del suelo y lavado de nutrientes, con la consiguiente degradación del suelo y la pérdida de capacidad para sostener cualquier tipo de producción (11).

Así también están la pérdida de pastos naturales pues los incendios afectan los medios de alimentación de la fauna silvestre (12), la pérdida de la biodiversidad (13) y la pérdida y emigración de fauna (14).

Sequías en Bolivia

De acuerdo con el Monitor de Sequías en Bolivia, del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (SENAMHI), en septiembre se observó un índice severo de sequía en la región altiplánica y parte de la macroregión de los Valles. El análisis hidrológico presentó valores extremadamente secos para las cuencas de Desaguadero, Lago Menor, Lauca, Mauri, Caquena, Poopó, Coipasa, Suches Keka, Kheto, Katari, San Juan del Oro (cabecera), Tumúsla (cabeceras), la cuenca del río Grande de Lipez y afluentes secundarios. 

“Se reportan afectaciones por sequía en especial en las macrorregiones del altiplano, chaco, algunos sectores de los valles, chiquitania y las llanuras del Beni. Las afectaciones en su mayoría son en la actividad ganadera en especial en bovinos, ovinos, camélidos (15) entre los más importantes, así también de pastizales que es fuente de alimentación para ganado (16), respecto a la actividad agrícola existen reportes en algunas zonas de la macroregión de los valles, muchas siembras están siendo retrasadas por la falta de lluvias (17) que septiembre y octubre se caracteriza por ser temporada de siembras en todas las macroregiones de Bolivia”, informó además el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras. 

A todos estos problemas también se suma que el fenómeno de El Niño que amenaza con una posible crisis hídrica para finales de 2024, se advirtió en la Cumbre del Agua que se realizó en septiembre de este año. Las características de este fenómeno es que se registran lluvias en mayor cantidad en tierras bajas y sequía en tierras altas. Así también se podría enfrentar problemas en la provisión de agua a las ciudades de La Paz y El Alto. (18).

Debido a esta situación que atraviesa el país, gran cantidad de personas hicieron el martes 25 un plantón en puertas del Ministerio de Defensa para exigir que se deroguen todas las normativas que permiten que se realicen chaqueos en el país, algunas de las leyes son la 790, 741, 952, 502, 739 y otras. 

 “No quiero ser alarmista, pero hay que alarmarse, o vamos a estar llegando a este punto de no retorno antes, y después vamos a estar llorando”.

/MVL/NVG/

 

 

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