La Paz, 28 Feb. (ANF).- Arturo Murillo, vocero de Unidad Nacional (UN) pidió, este lunes, que el presidente Evo Morales suspenda al ministro de Gobierno Sacha Llorenti y del comandante de la Policía Boliviana, general Óscar Nina, además del jefe de Inteligencia de la institución verde olivo, por considerar que el narcotráfico está tocando las puertas del Palacio de Gobierno.
Murillo, junto a los diputados Javier Navarro y Elizabeth Reyes, improvisaron una conferencia de prensa en plaza Murillo para dar a conocer la posición de UN sobre el vínculo del ex director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn), René Sanabria, quien después pasó a trabajar en el Centro de Inteligencia y Generación de Información (Cigein) dependiente del Ministerio de Gobierno.
En una nota pública, Murillo le recuerdó al presidente Evo Morales, que el ex general Sanabria fue designado por su persona para luchar contra el narcotráfico y fue uno de quienes impulsó la salida de las DEA de Bolivia, además de ser el gestor de un sistema de Inteligencia.
“Presidente, cómo es posible que el Ministro de Gobierno, el Comandante Nacional de la Policía y el jefe Nacional de Inteligencia no lo sabían y nos tenemos que enterar por la prensa Internacional que la mano derecha del Ministro de Gobierno caiga preso por narcotráfico. Por eso le pedimos que suspenda inmediatamente al Ministro de Gobierno, Comandante de la Policía y Jefe de Inteligencia, para que éstos sean investigados, para no creer que tengan nexos con el grupo del general Sanabria que deshonren a los bolivianos y a su institución”, afirmó.
El general Sanabria fue detenido en Panamá, el jueves pasado, su repatriación a Bolivia y de su supuesto cómplice Marcelo Foronda, fue denegado, pues Estados Unidos emitió hace un año una orden de captura internacional contra el ex director Nacional de la FELCN.
Además fueron detenidos, el coronel Sánchez Pantoja fue detenido en Bolivia por el Ministerio de Gobierno, junto al mayor Edwin Raúl Oña Moncada y los capitanes Franz Fernando Siles Ríos y Falsi Antonio Calderón Gil, quienes, según la cartera de Estado, eran estrechos colaboradores del general retirado.
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