La Paz, 12 de septiembre de 2024 (ANF). - Los incendios que arrasaron con 3.8 millones de hectáreas de bosques y pastizales, la protesta evista, una mayoría opositora en la Asamblea Legislativa y la crisis económica por la escasez de dólares y de combustible, y incremento de precios en los productos en general, son los cuatro frentes de conflictos que cercan al gobierno de Luis Arce.
Con relación al desastre ambiental que se registra en el país y que captó la atención del Ejecutivo tras tres meses de incendios, es uno de los problemas que enfrentar. Desde la pasada semana se activaron movilizaciones de activistas exigiendo atención de las autoridades nacionales en particular.
Hace 97 días que el fuego se expande en el departamento de Santa Cruz, en particular; Beni es el segundo departamento más afectado por las quemas, le sigue el departamento de Pando, luego se ubica los Yungas de La Paz, y en los últimos días Cochabamba también ha reportado incendios.
Este pasado fin de semana, ante el grito desesperado de las víctimas de los incendios, el gobierno decretó “emergencia nacional”. Familias han sido desplazadas de sus territorios, sus sistemas de producción y de generación de recursos económicos han sido destruidos; la flora y la fauna han sido gravemente afectadas, particularmente en los bosques, áreas protegidas y Tierras Comunitarias de Origen.
El diputado de Comunidad Ciudadana (CC) Enrique Urquidi dijo que las acciones del Gobierno para frenar las quemas son tardías. Consideró que no cuentan con un plan integral para evitar la deforestación en el oriente boliviano.
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