La Paz, 4 de julio de 2024 (ANF).- Es entendible que los gobiernos asuman una posición política en respaldo al gobierno de Luis Arce, tras la toma militar de la plaza Murillo, el 26 de junio, pero no es admisible que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) asuma una posición “política”, sin previa investigación de los hechos, afirmó la senadora Centa Rek.
“Planteamos como referencia que rechazamos unánimemente y solicitamos el retiro del comunicado 156 /24 que ha sido emitido por la CIDH a partir de los hechos ocurridos el 26 de junio pasado. ¿Por qué pedimos, solicitamos esta situación?, argumentamos con bases y motivos reales de que este comunicado además de precipitado, es un comunicado estrictamente político, guiado por razones políticas, porque no se han esclarecido los hechos del 26 de junio; no entendemos por qué la CIDH tiene que tomar una posición política en el problema actual que enfrentamos los bolivianos”, afirmó la legisladora.
La CIDH después de siete días se pronunció sobre las tres horas de toma militar en la plaza Murillo, en su comunicado condenó el “intento de golpe de Estado” por parte del Ejército en Bolivia. Esta versión fue objetada por la oposición, analistas que también valoraron las declaraciones del general Juan José Zúñiga que tras ser detenido dijo que el presidente Luis Arce ordenó la movilización de los blindados.
La alianza Creemos envió notas a la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos, a la Secretaría de la CIDH y al relator de la CIDH encargado de los asuntos de América latina, haciendo conocer sus observaciones en relación a la posición “política” del organismo que debería tener una postura independiente.
Señaló que anteriormente pidieron que estos organismos tengan cautela al momento de expresar sus opiniones porque pueden comprometer acciones contra la ciudadanía y en deterioro de las instituciones democráticas, de la institucionalidad que es la que se está erosionando y “para vulnerar derechos ciudadanos con violencia y persecución política”.
Considera comprensible que los gobiernos se manifiesten dando una adhesión, rechazo y opiniones, como lo hizo el presidente de Argentina, Javier Milei, como también expresó el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
Pero “la CIDH no puede ponerse a favorecer sin esclarecimiento de los hechos. Le decimos con apego a la verdad y a la situación que debe ser correcta que la CIDH se equivocó. Que retire su comunicado hasta que existan las investigaciones que corresponden para no hacer prevalecer un relato frente a otro, de golpe o autogolpe”, sostuvo.
Reiteró la postura de la bancada opositora en la Asamblea Legislativa Plurinacional, de Luis Fernando Camacho, “exigir de manera contundente que la CIDHB no se inmiscuya en temas políticos, que reciba opiniones y quejas y que espere la investigación de los hechos”.
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