La Paz, 10 de julio de 2024 (ANF).- El presidente del Estado, Luis Arce, defendió la toma militar de la plaza Murillo, del 26 de junio, como un “golpe de Estado”; y responsabilizó a las redes sociales desde donde se promueve el “falso discurso de un autogolpe”.
“Hermanos de la Alianza, las redes sociales han jugado y están jugando un papel crucial en la difusión de noticias falsas y la polarización de la vida política promoviendo el falso discurso de un autogolpe a través de reels, memes tuit y otros medios”, afirmó Arce.
El jefe de Estado participó este miércoles en la X Cumbre Extraordinaria del ALBA-TCP, un espacio multilateral de países aliados ideológica y políticamente. En ese espacio defendió la teoría gubernamental del “golpe militar”.
“La desinformación y las campañas orquestadas buscan erosionar la confianza en el gobierno legítimamente y constitucional, a través de las fake news o noticias falsas, la derecha y el nacionalismo conservador quieren imponer la matriz de que no fue golpe, fue autogolpe”, dijo.
Informó a los miembros del ALBA-TCP que hay más de 100 involucrados de distintos grados de las Fuerzas Armadas, señaló que varias unidades se negaron a sumarse a la intentona golpista.
“Supimos superar el aciago momento y demostramos que mientras dure nuestro mandato no abandonaremos el palacio ni la pueblo del que somos mandatarios”, afirmó la autoridad.
El pasado 26 de junio, un grupo de militares del Ejército a la cabeza de su comandante, Juan José Zúñiga (amigo personal del mandatario), tomó la plaza Murillo, llegó hasta ese punto con vehículos blindados y militares con uniforme y armas.
Las dudas en torno a un presunto golpe surgieron cuando el general Zúñiga, luego de ser detenido, afirmó que la salida de los blindados tenía la autorización del presidente Luis Arce, al igual que del ministro de Defensa, Edmundo Novillo.
“Rechazamos la narrativa de que no hubo golpe de Estado militar, quienes promueven esta narrativa representan intereses que son ajenos a los intereses del gobierno, de Bolivia y del pueblo”, sostuvo Arce.
Hasta la fecha no se conoce las razones de por qué no funcionaron las unidades de Inteligencia de la Policía o de las Fuerzas Militares, cómo es posible que ni el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, ni el ministro de Defensa, Edmundo Novillo, no hubieran conocido lo que presuntamente se estaba gestando al interior de la entidad castrense.
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