La Paz, 9 de mayo de 2023 (ANF).- En su informe de dos años y medio de gestión, el presidente Luis Arce admitió que Bolivia atraviesa problemas de liquidez de dólares y aseguró que esa dificultad será superada con la aprobación de la ley del Oro. También exhortó a seguir profundizando la bolivianización.
“Bolivia como algunos países de la región enfrentan problemas de liquides del dólar estadounidense, que en nuestro caso, producto de la aprobación de la ley del oro y otras medidas que estamos asumiendo, iremos superando paulatinamente”, remarcó.
Arce afirmó que varios países como Argentina, Brasil y otros ya acordaron con China negociar en yuanes, que es la moneda de ese país, en remplazo de dólares.
“Para enfrentar estos cambios mundiales, en nuestro país estamos tomando medidas, pero además debemos seguir profundizando la bolivianización, que ha sido y es una fortaleza de nuestro modelo económico”, indicó.
El mandatario resaltó que desde el 2021, el crecimiento de la economía superó el 6% y en la gestión 2022, alcanzó el 3,5%.
“Es un resultado muy importante, pues a pesar de los intentos de boicot a la economía y el funesto paro en la ciudad de Santa Cruz en la gestión 2022, nuestro PIB nominal se incrementó de $us 40.703 en 2021, y $us 44.315 en 2022, la cifra más alta de nuestra historia”, agregó el jefe de Estado.
También dijo que la desocupación disminuyó sustancialmente de un pico de 11% en 2020 a un nivel de 4% al cuarto trimestre de 2022.
El presidente Luis Arce promulgó el pasado viernes la Ley del Oro, luego que la norma sea aprobada en sesiones accidentadas en la Cámara de Diputados, posteriormente sancionada por la mayoría del Movimiento al Socialismo (MAS) en el Senado.
La ley del Oro forma parte de las medidas que pretende aplicar el Gobierno para fortalecer las Reservas Internacionales. Al último reporte del BCB, a febrero, las Reservas eran de 3.538 millones de dólares, de los cuales 372 millones son en divisas.
Las divisas en las reservas cayeron a la mitad respecto a finales del año pasado. La falta de liquidez fue uno de los factores que observaron las calificadoras internacionales para rebajar los ratings de Bolivia como emisor de deuda.
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