La Paz, 30 de septiembre de 2024 (ANF).- Antes de que el presidente Luis Arce declare desastre nacional, el alcalde de San Rafael de Velasco, Jorge Vargas, suplicó que tome esta medida porque la situación era “insostenible”. “Nos estamos envenenando”, exclamó la autoridad al señalar que los incendios se reactivaron en un 80%.
La autoridad municipal este lunes grabó un video muy temprano para mostrar la densa humareda en el pueblo debido a los incendios forestales. “La que sufre es la población. Nos estamos envenenando por los incendios. No se nota ni el templo de San Rafael y estamos en media plaza”, relató mostrando el ambiente que vive esa población.
Vargas apunto que la calidad del aire es cada vez peor debido al humo, siendo los grupos más vulnerables como los ancianos, niños, bebés, mujeres embarazadas, personas con enfermedades cardíacas, asma, alergias, las que se ven afectadas y con el paso del tiempo su salud quedará muy deteriorada.
Aseguró que la situación es “insostenible” en todos los municipios de la región chiquitana de Santa Cruz, aseguró que el gobierno no tiene la capacidad económica, tampoco la capacidad logística para hacer frente a este desastre ambiental, “peor la voluntad política de querer apagar los incendios”.
La pasada semana, específicamente el 24 de septiembre, el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, comprometió al alcalde municipal que se instalaría el Comando de Incidencia, cosa que no ha ocurrido hasta el fin de semana.
“(El viceministro) Me prometió que a la brevedad posible iba a instaurar en San Rafael el Comando de Incidencia y en la comunidad de Miraflores un comando de avanzada, pero hasta el momento no llegó nadie del Ministerio de Defensa”, sostuvo el alcalde en el programa Protagonistas de la Mañana.
“Presidente Luis Arce por amor a Dios desde la Chiquitanía le imploramos que se declare desastre”, ha rogado el alcalde del municipio de San Rafael de Velasco, departamento de Santa Cruz, Jorge Vargas, porque los incendios se reactivaron en 80%.
Vargas señaló que la “fauna clama por su vida, nuestros árboles caen hechos cenizas, el bosque y sus habitantes exhalan su último aliento cuando el fuego sin piedad los quema y acaba con ellos”.
Con la calidad del aire cada vez peor gracias al humo, los grupos más vulnerables, ancianos, niños, bebés, mujeres embarazadas, personas con enfermedades cardíacas, asma, alergias, se ven afectadas y con el paso del tiempo su salud quedará muy deteriorada.
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