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Opinión

Luchismo vs Evismo

10 de Junio, 2021
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JUAN CARLOS FERREYRA PEÑARRIETA

La reapertura reciente de las “relaciones de confianza” con Estados Unidos, viene a constituirse en hecho muy importante no solo en el campo de las relaciones diplomáticas, sino en la parte de la política interna del país. Debido a que es otra acción que viene a diferenciar del gobierno actual del Movimiento Al Socialismo (MAS), presidido por Luis Arce Catacora-David Choquehuanca Céspedes con la anterior gestión del propio MAS dirigida casi en 14 años por Evo Morales Aima-Álvaro García Linera.

Como se puede apreciar de a poco va surgiendo una nueva corriente ideológica al interior del propio MAS, denominada como el Luchismo. Habiendo en anteriores oportunidades ya marcado diferencia con la corriente tradicional del Evismo. El ejemplo más claro de lo señalado es que el actual primer mandatario el 8 de noviembre del año pasado juró a su cargo con la mano derecha puesta en el corazón sin levantar la mano izquierda con el puño cerrado, aspecto que era común y corriente en Evo y Álvaro, lo que generó en ese entonces muchas reacciones e interpretaciones.

Hoy en día la corriente del Evismo se encuentra muy debilitada al interior del propio partido oficialista. Perdió toda credibilidad hasta el punto que varios/as de sus dirigentes disidentes pidieron en semanas pasadas que se debe “purgar” a muchas ex altas autoridades incluyendo al propio Evo Morales que formaron parte del primer ciclo de gobierno que tuvo el MAS dirigiendo el país. En las elecciones nacionales de octubre del año pasado, se demostró que sin el Evismo el MAS puede seguir en la vida política. No en vano obtuvo un contundente 55% de apoyo a nivel nacional.

En el fondo el Luchismo, tiene un fuerte apoyo de una gran mayoría de los servidores públicos que forman parte de la administración pública nacional, más que todo por su condición de tecnócrata. Un ejemplo de eso se lo puede percibir al interior del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas en la que una gran cantidad de sus dependientes se formaron y capacitaron en base a las directrices que impartió en casi doce años el entonces titular de esa cartera de Estado, Luis Arce Catacora.

Hay que reconocer que no es un político de convicción, pero seguramente de a poco está aprendiendo esas habilidades y destrezas que debe tener un político para dirigir un país. Eso se lo percibe en sus discursos y declaraciones públicas que hace a la nación en donde todavía le hace falta que dé el tono carismático y que “enamoren” sus mensajes que emite. Me imagino que tiene un equipo en cuanto a su imagen presidencial que está trabajando en eso para mejorar lo anteriormente señalado.

Si Luis Arce Catacora, logrará en corto plazo despojarse de la imagen de Evo Morales, habrá dado un giro de 180° a su gestión presidencial. El ex mandatario ya es historia, ya no cuenta en el presente. El actual presidente tiene que marcar su propia identidad de gestión gubernamental y de su accionar político. Es una gran oportunidad que no la debe desperdiciar.

Si el Luchismo realmente pretende ser una nueva corriente ideológica al interior del MAS, debe desligarse de varias autoridades actuales que forman parte de su gestión y que las mismas son leales al Evismo, quienes se constituyen “la piedra en el zapato” y que desde luego no lo dejarán gobernar a su propio estilo.

No se debe olvidar que Luis Arce Catacora, proviene de la clase media tradicional a la que tanto odian Evo Morales y Álvaro García Linera. Y sí el actual primer ciudadano del país, lleva una gestión presidencial con identidad propia, sin sombras del pasado masista, también tendrá el apoyo de esa gran masa humana que fue determinante para que Morales Aima llegará al poder el 2005, con probabilidad alta, además, de que pueda ir a una reelección en las próximas elecciones generales.

Es cuestión que se anime a dar es gran paso decisivo. Él sabe en el fondo que de a poco va creciendo su apoyo a nivel endógeno como exógeno, debiendo además cambiar cuanto antes, ese imaginario que tiene la opinión pública nacional “de quien gobierna el país, es Evo Morales y No Luis Arce Catacora”. El desafío está lanzado.

Juan Carlos Ferreyra Peñarrieta es comunicador social


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