El 2024 está terminando y muchos ya están haciendo la evaluación del año, seguramente a la luz de sucesos políticos o económicos. Las empresas formalmente establecidas, y que se ahogan en el mar de impuestos que deben pagar, así como sueldos y multas inventadas, están viendo la cantidad de ingresos que han tenido y por supuesto de sus egresos.
Las ganancias se expresan mediante gráficos que son de subidas o bajadas, o con colores si son números verdes o son números rojos.
Bolivia enfrentó un escenario económico desafiante caracterizado por bajo crecimiento, desequilibrios fiscales y vulnerabilidades externas, lo que subraya la necesidad urgente de reformas estructurales y políticas de estabilización económica.
La desaceleración del país, expresada en rojo, refleja una combinación de factores, como la reducción de las exportaciones y un clima de inversión desfavorable.
Plurilandia continúa con un déficit fiscal significativo debido a: miles de burócratas lactando de la glándula mamaria estatal y a los subsidios, particularmente en carburantes. Esto ha presionado las reservas internacionales y limitado el margen de maniobra para implementar políticas expansivas.
Las reservas del Banco Central de Bolivia siguen en niveles críticos, dificultando la estabilidad del tipo de cambio y aumentando la dependencia de fuentes externas para financiar el déficit.
La falta de incentivos y la inseguridad jurídica han afectado las inversiones privadas. Además, las empresas estatales enfrentan déficits operativos, lo que limita su capacidad de contribuir al crecimiento económico.
La inflación según cifras oficiales está en 4.3%, pero de acuerdo a la Federación de Entidades Empresariales de Cochabamba, la Llajta ha llegado a una inflación acumulada del 8,82%. El control de la inflación ha requerido un control estricto de precios que afecta la competitividad y limita la recuperación económica a largo plazo.
Pero quisiera proponerte una nueva forma de evaluar tu año.
Mira hacia atrás y piensa, tal cual sucede con una de las canciones del afamado musical Rent, cuántas tazas de café has tomado con tus seres queridos, cuántas veces te has levantado de noche para ir a ver si tus hijos están bien tapados, cuántas veces has visto el amanecer desde tu ventana, cuántas veces has tomado un té con tus familiares, pensando que es una bendición tenerlos aquí, cuántas veces has caminado por el pasto sin zapatos y has sentido la tierra en tus pies, cuántas veces has visto picaflores en tu jardín, estrellas en un cielo despejado, amaneceres en colores rojizos, o simplemente has sentido que has dejado de medir el tiempo porque estabas viviendo y te has olvidado del reloj.
Cuántas veces ha sentido que no iba a haber solución, que ese problema era muy difícil de resolver, que no iba a haber un día más y sin embargo has llegado aquí.
Ese dolor, esa herida, ese trauma, aquello que requirió fisioterapia, una palabra amiga, o terapia psicológica es lo que te trajo al día de hoy.
Entonces si tuvieras que evaluar el 2024, sin ese binomio, o esa división de lo ganado y lo perdido, qué es lo que has aprendido este año.
La autora es periodista