En esta oportunidad estoy leyendo las Conclusiones detalladas de la Misión internacional independiente de determinación de los hechos sobre la República Bolivariana de Venezuela, es un documento extenso donde se describe, sustenta y asigna responsabilidades a los que cometieron violaciones sistemáticas de los DDHH desde enero del 2014 hasta julio 2020. En esta oportunidad no me referiré al contenido que es doloroso, duro y dramático, pero es la verdad de lo que sucede en un país donde se pierde el Estado de derecho y un grupo de delincuentes toman el poder político, teniendo como cabecilla al dictador Nicolas Maduro Moros (aunque algunos no lo quieran admitir es un DICTADOR, este informe lo certifica).
Así mismo, quisiera resaltar lo relevante, necesario y útil que existan este tipo de organizaciones que no dependen del Estado, ni de ningún partido político (así se evitan ser acusados de partidismo), porque gracias a su labor que muchas veces pasa desapercibido se logra documentar los atropellos que se cometen contra la dignidad de las personas, además, son los que promueven la información y defensa de los DDHH en sectores y lugares que se piensa que todo esta perdido en esta materia; las acciones de estas organizaciones son al mismo tiempo difíciles y de mucho peligro, ya que sus miembros son acosados, amenazados, difamados social y moralmente, en muchos casos son asesinados.
De igual forma, a medida que voy leyendo el informo (muy duro para mí como venezolano) me animo a seguir promoviendo los DDHH, que existan en los países diversas ONG promovidas por la sociedad civil para custodiar los derechos y deberes que tiene cada ciudadano y sobre todo documentar los casos donde el Estado, el Gobierno o las fuerzas publicas sean responsables para poder denunciarlos a nivel nacional e internacional es un camino largo y espinoso, pero necesario para que tanto en el presente como el futuro lo que ostentan el poder lo piensen dos veces antes de atentar contra cualquier persona.
Ronald Valera es filósofo
