La Paz, 19 de septiembre de 2022(ANF).- El Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA) sostiene que la proyección laboral en el país no es alentadora porque la tendencia es el incremento de la informalidad, la ocupación por cuenta propia y los empleos asalariados son cada vez más precarios.
“La situación del empleo no va a mejorar mientras no se implementen políticas que generen industrias que deriven en empleos protegidos, la tendencia y lo que miramos desde el CEDLA es que la informalidad está en aumento, ante la falta de un empleo asalariado”, manifestó la investigadora de la entidad, Giovanna Hurtado.
La tasa de ocupación aumentó y bajó la tasa de desempleo en el país, en 2020 llegó al 8,4% y para el segundo trimestre de esta gestión se registró 4,5%, pero ¿cuáles son las razones para que estos índices hubieran bajado?
Hurtado explica que más que una recuperación de los empleos asalariados, la baja de la tasa de desempleo se explica por el incremento de las ocupaciones en el sector informal, principalmente el trabajo por cuenta propia”.
Este fenómeno se ha agudizado durante la pandemia porque hubo una ola de despidos de empleos asalariados y una pérdida del trabajo independiente. Muchas empresas redujeron su personal, los restaurantes cerraron y los comerciantes no salieron a las calles.
“A la fecha tomando información oficial al segundo trimestre de 2022 el 60% de los trabajadores tiene un empleo independiente, la mayoría como cuenta propia, es decir, el empleo asalariado que en teoría es el más protegido llega casi al 40%”, dijo a la ANF.
Para Hurtado este es un “dato alto”, aunque precisa que tuvo una ligera disminución en relación al 2020 cuando estaba en 65%. Sin embargo, ese 60% que tiene un trabajo independiente y por cuenta propia no tiene protección social, no aporta a las AFP no tiene seguro de salud.
“El sector informal no tiene esos beneficios, los ingresos son más bajos en promedio del ingreso laboral del país, trabajan jornadas extensas. Principalmente en el comercio, hombres y mujeres, pero en mayor porcentaje las mujeres.
“Durante la pandemia sobre todo la parte más dura, las personas han buscado un autoempleo, es decir, que las personas han desarrollado una actividad por cuenta propia que generalmente se da en el sector informal”, comentó.
El escenario es “desalentador” en el futuro, sostiene la investigadora, porque, aunque hay personas que han recuperado sus trabajos no lo han hecho en las mismas condiciones, sino “a costa de hacer muchos sacrificios.
“Mucha gente que ha perdido su trabajo asalariado en el año de la pandemia ha sido recontratado por las empresas, pero han cerrado el contrato de trabajo y han perdido antigüedad y muchas han sido recontratadas con salarios bajos, los nivelaron al mínimo nacional”, explicó Hurtado.
Por esta razón “subió levemente la tasa de empleo”, sin embargo, la “flexibilización laboral” sigue siendo una realidad, esas prácticas vienen desde la época del neoliberalismo y se han mantenido en el gobierno del Movimiento al Socialismo, y la pandemia solo ha profundizado con trabajos temporales y sin seguridad laboral.
“La flexibilización laboral es peor que antes, se ha profundizado esa flexibilizado es como si se hubieran impuesto esas prácticas, se hubieran estandarizado en diferentes relaciones laborales”, sostuvo.
Este escenario ha llevado a una mayor explotación laboral de las personas y afecta directamente en la calidad de variedad de las personas.
El Gobierno destaca como positivo que se haya reducido el índice de desempleo en el país, pero Hurtado precisa que “no se da por mejores trabajos, si hay trabajo, pero trabajo más precario y en peores condiciones”.
Sugirió al Gobierno que mire a la gente, que recorra las calles, las ferias, contacte con los trabajadores porque la realidad de la gente es diferente porque si bien la tasa de crecimiento económico es del 3,97% para el primer trimestre, pero cuando “comparamos el discurso gubernamental y la realidad que viven las personas vemos una brecha muy grande” entre la situación de los trabajadores y los datos oficiales que se reflejan en el país.
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