Muestra de la destrucción en el sur de Florida.
La Paz, 8 de octubre (ANF).- Después de su mortífero paso por Haití, donde causó una tragedia de graves proporciones y dejó casi 900 muertos, el huracán Matthew perdió fuerza y ha afectado de manera relativamente leve a los estados de Florida y Georgia.
En Haití las marejadas fueron inéditas, lo mismo que los vientos, que llegaron a 230 kilómetros por hora. El fenómeno dejó a un millón de haitianos afectados, y una campaña internacional de ayuda ha sido organizada.
Tras atravesar el Caribe e impactar directamente sobre Haití, el país más pobre de las Américas, el ciclón bajó de categoría 4 a 2 (de cinco posibles) y bordeó la parte este de Florida y Georgia, pero sin entrar de lleno en tierra.
En EEUU sólo se han producido la muerte de cuatro personas, un hombre y una mujer que se vieron afectados por falta de medicina y dos mujeres que sufrieron el impacto de árboles.
Craig Fugate, director de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias de Estados Unidos, dijo que le preocupa que los daños relativamente leves vistos hasta ahora puedan dar a las personas una falsa sensación de seguridad y que hagan una vida normal, poniéndose en peligro.
“El riesgo real son las marejadas a causa de la tormenta, especialmente en el norte de Florida y el sur de Georgia. Estas son áreas sumamente vulnerables. Estas zonas no han visto un potencial de daño tan alto” en décadas, sostuvo. Por eso pidió a los residentes no salir de sus casas.
La llegada de Matthew activó masivas evacuaciones a lo largo de la costa este del país, desde Florida y Georgia hasta las Carolinas del Sur y Norte, hacia donde se dirige este sábado.
Los vientos máximos de Matthew, que se desplaza hacia el norte y se aleja de la costa noreste de Florida, son de unos 175 kilómetros por hora.
/ANF/
