La Paz, 27 de septiembre (ANF).- El ministro de Minería, César Navarro, admitió el miércoles que producto de un trabajo no planificado de las cooperativas mineras en el emblemático Cerro Rico de Potosí, se derivó en la depredación del yacimiento. Dijo que tras la muerte de dos obreros sepultados por el hundimiento de un sector de la estructura, se paralizaron las actividades en un perímetro de 400 metros para reubicar a algunas cooperativas.
“Las cooperativas se caracterizan no tanto por tener excedente económico, sino utilidad como socios, entonces más mano de obra, tienen más utilidad y la mano de obra sin planificación significa depredación”, señaló luego de participar de la reunión del gabinete ministerial en Palacio de Gobierno.
Navarro dijo que actualmente cerca de 9 mil cooperativistas operan en el Cerro Rico de Potosí, y que 80 mil de las 250 mil personas que habitan la Villa Imperial dependen de la actividad minera. “No estamos hablando de poca cosa”, subrayó.
El cerro Rico de Potosí fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), y se advirtió que si no se garantizaba su preservación corría el riesgo de perder ese título.
Rescate de obreros
Según el titular de Minería, los trabajos de rescate de los cuerpos de dos obreros volqueteros que fueron sepultados hace una semana por un sifonamiento en la cuota 4.390 del Cerro Rico, se vieron complicados por el mal clima acompañado por nevada y 5°grados bajo cero.
“El día viernes nos reunimos con las cooperativas, con los familiares (de los fallecidos), hicimos una verificación en el lugar (…). La actividad era legal porque es un área donde la cooperativa tenía contrato con la Comibol, lo que no se tenían eran las condiciones de seguridad para la explotación, ese es el problema que se activó”, señaló.
En ese marco dijo que el lugar donde se produjo el derrumbe se paralizó la actividad productiva sobre un perímetro de 400 metros. “No existe ninguna actividad minera; segundo, lo que acordamos con la Fedecomin y la Gobernación es que el Servicio Geológico de Minas entrará a trabajar un estudio complementario geofísico y geotécnico para definir cuáles son las zonas de alto riesgo y a partir de ello vamos a empezar a delimitar la actividad minera”, aseguró.
Aclaró que los jóvenes fallecidos no eran mineros, sino volqueteros que trabajaban en el lugar cargando minerales.
/JMC/FC/
