Sucre, 08 Ago. (ANF).- Hasta fin de año la deuda con la CAF, banco de desarrollo regional, superará los 1.700 millones de dólares, de acuerdo con el anuncio que realizó la ministra de Planificación del Desarrollo, Viviana Caro.
“Con la CAF tenemos una cartera de 1.600 millones de dólares, esperamos llegar a fin de año hasta 1.700” millones, señaló la autoridad en la firma de nuevos contratos de créditos con el presidente del organismo multilateral, Enrique García.
El banco de desarrollo regional es el mayor acreedor de Bolivia, a junio de este año, la deuda sumaba 1.531 millones de dólares, que corresponden al 35 por ciento del total, de acuerdo con el reporte mensual del Banco Central de Bolivia (BCB).
Caro aseguró en Chuquisaca que “la CAF se ha convertido en uno de los socios más importantes para la región”, puntualizando que “es nuestro banco”, y detalló que “es un banco en el cual participamos activamente y que nos ha estado apoyando”.
Este jueves, el Estado contrató nuevos créditos para obras viales, proyectos de electrificación y pre-inversión. Al respecto la ministra agradeció “la rapidez con la que se ha procesado los proyectos”.
“Creemos que esa visión tanto de infraestructura como de desarrollo urbano es cada vez mas importante para lograr ese equilibrio que todos buscamos”, remarcó la autoridad en el acto que se cumplió en Chuquisaca y fue transmitido por el canal de televisión estatal.
El Gobierno suscribió tres créditos. El primero para construir la carretera Padilla-El Puente y el diseño final de la vía El Puente-Monteagudo. El segundo para pre-inversión de proyectos para la Agenda 2025, para los que “ya hay que empezar a prepararse”, señaló Caro al mencionar los planes de conexión energética que “son los más difíciles y los que más tiempo nos toma”.
El otro préstamo es para proyectos viales, de infraestructura y de electrificación en el área rural de Santa Cruz, gestionado “a nombre de la gobernación” de ese departamento. Es una infraestructura que beneficiará a la zona más productiva de la región y “van a permitir que los pequeños productores puedan sacar sus productos a las ciudades”.
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