Notas periodísticas
Comunidad Uru Murato carece de agua y hace ritual de la lluvia
La Paz, 1 de diciembre (VQC).- Las olas de calor que vive el mundo son también una realidad de las pequeñas poblaciones agrícolas y pesqueras de Bolivia. Este es el caso de la comunidad Uru Murato de Oruro que sufre desde hace más de una década problemas con el agua y enfrenta la desaparición de sus ríos y lagos.
"Nosotros no tenemos agua, la tomamos de este pozo. Los urus toman de este pozo y por esa razón los niños y ancianos son los que más se enferman. Antes este pozo era más cercano y ahora es más profundo porque el cambio climático nos está afectando y el agua se está secando", contó a Voces Que Cuentan (VQC) uno de los pobladores de Uru Murato.
Ante esta crisis, las autoridades del pueblo y los abuelos decidieron hacer un ritual del llamado de la lluvia y del agua que consiste en recoger agua de otro lugar y llevarla hasta donde está la sequía para pedir a sus dioses tutelares que regrese el agua.
El hombre más anciano del lugar echó en Uru Murato el agua traída desde Copacabana donde está el Lago Titicaca. El abuelo realizó diferentes peticiones y pronunció las siguientes palabras: "Vamos a pedir al Señor San Pedro que es dueño del agua que haya agua en el Lago Poopó y que haya lluvia. ¡Jallalla!".
La esperanza de que llueva en esa zona persiste. Sin embargo, los pobladores que antes se dedicaban a la agricultura y la pesca, ahora se dedican a la producción de sal yodada y también a la elaboración de artesanías.