La Paz, 18 de abril (ANF).- El informe “Clasificación de RSF: El autoritarismo y la desinformación, los males que deterioran la libertad de prensa en América Latina” de Reporteros Sin Fronteras (RSF) afirma que el gobierno del presidente Evo Morales controla la información, censura y hace callar a las voces críticas del país, lo que a su vez ocasionan que los periodistas se autocensuren.
En el informe, incluye a Bolivia en el capítulo “Censura del Estado y autoritarismo”, en el que menciona la complicada situación que atraviesan los periodistas en Nicaragua, Venezuela y Cuba para realizar su labor.
“La situación de Bolivia no es menos alarmante. Siguiendo el modelo cubano, el gobierno del presidente Evo Morales, en el poder desde 2006, controla la información, censura y hace callar a las voces más críticas del país, lo que genera una fuerte autocensura entre los periodistas”, dice el informe 2019.
Bolivia ocupa el puesto 113 de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa en el mundo. A comparación del informe 2018, bajó tres puestos.
En el informe 2018 explicaba que el gobierno de Morales hacía “callar a los medios de comunicación críticos y los funcionarios no dudan en atacar en público a los periodistas de oposición o en emprender procesos judiciales para amordazarlo”.
El Informe 2019
Cada año Reporteros sin Fronteras publica su informe que brinda un panorama de la cómo se desarrolla el trabajo de los periodistas en el mundo, en este caso haciendo énfasis en Latinoamérica. En el mismo observó un preocupante deterioro de la situación de la libertad de prensa durante el 2018.
“Las condiciones de trabajo de la prensa empeoraron en la mayoría de los países de la región, donde los periodistas aún padecen a menudo actos de violencia, presiones y la censura del Estado”, inicia el informe.
Explica que la ligera mejora observada en América Latina en la edición anterior de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa de RSF duró poco.
Resalta que el ambiente en que trabajan los periodistas de la región es cada vez más hostil y quienes cubren temas delicados suelen padecer actos de violencia, intimidaciones y presiones de todo tipo.
Menciona que en los países que tuvieron elecciones generales el año pasado se registró un aumento de las agresiones a periodistas, Esto ocurrió en México, Brasil, Venezuela, Paraguay, Colombia, El Salvador y Cuba.
“La mayoría de ellas fue perpetrada por políticos, funcionarios y militantes partidistas (a través de internet). Estos incidentes contribuyeron a crear un clima generalizado de desconfianza –a veces de odio– hacia la prensa”, asegura.
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