La Paz, 27 de noviembre de 2024 (ANF).- La falta de agua para el consumo humano se ha convertido en un problema crítico para varias comunidades del Chaco Chuquisaqueño, y las demoras en la perforación de pozos son una de las causas que la agravan.
“La gobernación está demorando por las maquinarias, son máquinas ya obsoletas, deterioradas por el uso que le han venido dando”, señaló Chanel Segovia, dirigente campesino del Chaco Chuquisaqueño.
Este problema se agrava por el hecho de que las máquinas fueron dadas en comodato por el Ministerio de Medio Ambiente a la gobernación hace ya varios años, pero continúan utilizándose sin los debidos mantenimientos, lo que genera dificultades mecánicas cada vez que se intenta realizar una intervención.
La burocracia también juega un papel fundamental en esta crisis. “Nosotros esperamos que la atención sea inmediata, sea urgente porque estamos hablando de agua para el consumo humano, pero siempre viene el tema burocrático”, añadió.
Esta situación ha llevado a que las necesidades de las comunidades no sean atendidas con la seriedad que requieren. Las solicitudes de intervención no son nuevas. “Hay comunidades que me han hecho llegar nuevamente solicitudes y ellos me indican que hace siete años se había hecho el estudio geofísico en su comunidad por parte de la Gobernación y se tenía planificado la intervención, pero hasta el día de hoy no han intervenido”, lamentó Segovia.
Esta falta de acción ha generado descontento entre los habitantes, quienes ven cómo su acceso a un recurso vital se ve comprometido, pero los problemas no se limitan solo a la maquinaria obsoleta, lo otro son los trámites que se tienen que hacer.
De acuerdo al informe de Rendición Pública de Cuentas Final 2023 de la gobernación, en esa gestión se perforaron 15 pozos para beneficiar a 4.560 familias. La inversión realizada fue de 2.349.717 bolivianos.
La falta de recursos económicos también es una justificación recurrente por parte de la gobernación. “Creo que la Gobernación no tiene los suficientes recursos, siempre justifica de esa manera”, dijo el dirigente.
“En la época seca prácticamente los ojos de agua se han ido secando, no hay agua para el consumo humano, mucho menos para el animal”, advirtió Segovia.
Aunque recientemente han comenzado las primeras lluvias, esto no ha sido suficiente para revertir los efectos de meses de escasez. “Los gobiernos municipales hacen la distribución de agua en cisternas, pero hace unos 10 a 15 días ha empezado las primeras lluvias aquí en la región, lo cual ha mejorado ligeramente la situación”.
La agricultura también se ha visto afectada gravemente. “Anteriormente podíamos producir regando la superficie con el agua de la quebrada, nuestra fuente de agua, pero ahora las quebradas también se han secado”, dijo el dirigente.
La falta de agua no solo afecta el consumo humano, sino también los cultivos necesarios para sustentar a las comunidades. La frustración entre los ciudadanos crece ante una situación que parece no tener solución a corto plazo. Las demoras en la perforación de pozos son un reflejo del desinterés por parte de las autoridades hacia las necesidades básicas de estas comunidades.
Segovia enfatizó que es fundamental que se tomen medidas urgentes para abordar esta crisis del agua. La implementación inmediata de proyectos para perforar nuevos pozos y reparar los existentes podría aliviar significativamente esta problemática.
Las comunidades claman por una respuesta efectiva y rápida. “Es necesario que entiendan que estamos hablando de un líquido vital que todos debemos contar para el consumo humano”, remarcó el dirigente, que tiene en claro que, sin una respuesta adecuada y oportuna, el futuro del acceso al agua potable en estas regiones sigue siendo incierto.
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