La Paz, 29 de septiembre (ANF).- Los embarazos precoces
entre los 12 a 18 años de edad ponen en riesgo la vida de las madres y sus
bebés aseguró la ministra de Salud Ariana Campero al emprender en Cobija , Pando,
el reto de prevenir el embarazo
adolescente.
Anunció que el objetivo se cumplirá a través de la concientización y una sostenida campaña que promueva el uso de preservativos. “Es importante hacer entender a toda la población, no solo a los adolescentes, que el embarazo temprano se puede prevenir educando, informando oportunamente, danto el apoyo a los y las adolescentes, pero además no prohibiendo ni generando tabúes y prejuicios alrededor de las relaciones sexuales”, afirmó la Ministra.
La campaña fue lanzada durante la Feria Educativa de Prevención de Embarazo en Adolescentes, realizada en Cobija – Pando.
La autoridad convocó a los jóvenes a tomar conciencia que los embarazos precoces no hacen más que frustrar sus proyectos de vida y truncar sus estudios secundarios y profesionales.
Campero enfatizó que el Gobierno busca que los jóvenes alcancen su pleno desarrollo integral, físico, emocional e intelectual que posteriormente les permita tomar decisiones maduras y voluntarias.
La feria permitirá que los estudiantes accedan a información fidedigna sobre salud sexual y reproductiva para que puedan tomar decisiones informadas y decidan sin traumas sobre su vida sexual y reproductiva, afirmó la autoridad.
Destacó que Bolivia bajó los índices de embarazo precoz en los últimos cuatro años. “Aún no podemos decir que estamos orgullosos de los datos, hemos ido disminuyendo pero sí tenemos que seguir con estas acciones, reuniéndonos con los adolescentes para formarlos y poder garantizar que ellos puedan ser los que construyan su futuro y decidan sobre su vida”, añadió.
Dijo que Pando es un ejemplo de que la muerte materna está muy vinculada al embarazo en la adolescencia pues “en la gestión pasada, de los siete casos de muerte materna que hubo, los siete fueron en mujeres adolescentes menores de 19 años” por lo que celebró que en lo que va del año no haya ocurrido ningún muerte materna adolescente.
Por esta situación es que el Ministerio de Salud decidió centrar sus acciones en este departamento para trabajar todo el año de manera directa con los adolescentes y disminuir los indicadores de muerte materna y embarazos tempranos.
“Aún tenemos hasta agosto 672 embarazadas adolescentes a quienes les hacemos seguimiento. Debemos controlarlas, apoyarlas, no discriminarlas para que tengan un embarazo seguro, no pongan en riesgo sus vida y puedan seguir con sus sueños y aspiraciones”, acotó.
Por otro lado, afirmó que hablar del embarazo en la adolescencia implica también referirse a la prevención de la violencia sexual. “La violencia sexual se da en los hogares y fuera de ellos, esto nos tiene que llamar profundamente la atención, no solo de las autoridades sino de toda la población”, sostuvo.
Enfatizó que hay leyes y normas que protegen a los niños, niñas y adolescentes y es responsabilidad de toda la sociedad controlar y velar por la integridad física y emocional de este sector.
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