La Paz, 13 de marzo (ANF).- La asambleísta Willma Magne afirmó que es competencia del Gobierno Municipal de Apolo velar por la población en situación de vulnerabilidad refiriéndose a Nilver Ortiz que vive encerrado hace más de seis meses, porque padece un cuadro de locura, según sus familiares.
“Definitivamente es competencia del municipio generar políticas respecto a los adultos mayores, niños, niñas y personas con discapacidad. Deben velar por su población en vulnerabilidad y debe asumir su responsabilidad”, declaró la asambleísta.
Nilver tiene 28 años, sufre problemas de locura desde hace 10 años, según su madre estos trastornos se produjeron cuando retornó del servicio militar. Sin embargo, con el tiempo se fue poniendo agresivo por eso fue aislado en una “jaula” hace más de medio año.
Las comunidades de Copacabana, Puchahui, Chiapana Arana y Piedras Blancas de Apolo piden ayuda para que Nilver sea trasladado a un centro psiquiátrico y sea atendido por su condición de discapacidad, sin que sus derechos sean violados.
“Es una verdadera pena que por falta de recursos económicos de su familia, el joven viva en esas condiciones, mucho más encerrado”, declaró Magne, al insistir que el municipio está llamado a hacerse cargo de su población.
Richard, hermano menor de Nilver, pidió ayuda para internarlo, porque su familia ya no cuenta con recursos económicos para llevarlo a un centro psiquiátrico. \"Solo si lo sacan a mi hermano y lo ponen en un centro donde pueda estar bien sería suficiente. Nosotros como sea podemos salir adelante\", dijo, según radio Apolo.
Magne explicó que antes de recurrir al Servicio Departamental de Gestión Social, se deben agotar los esfuerzos en el Gobierno Municipal, si es que esta instancia no tiene posibilidades tendrá que acudir al Sedeges previo un informe.
“Nilver tiene derechos, así como el resto de la población a vivir en tranquilidad”, afirmó la asambleísta, por esa razón el municipio debe asumir su responsabilidad en el tema.
La mamá del joven, Virginia Avelino de 47 años, relató a ANF que Nilver hace 10 años, antes de prestar su servicio militar en Cobija, era sano y buen estudiante, pero inexplicablemente regresó del cuartel demente y agresivo, lo que causa temor entre los habitantes de la comunidad de Copacabana, donde vive junto a sus 11 hijos.
/NVG