La Paz, 6 de junio (ANF).- Jhony Flores, docente de idioma aymara, está desesperado porque no encuentra un trabajo fijo y debe estar pendiente de los anuncios que solicitan maestros interinos o de suplencia en alguna unidad educativa para ejercer y sustentar económicamente a su familia. La mayoría de las suplencias dura como máximo tres meses.
“No me queda de otra, el Gobierno se ha hecho la burla de nosotros. Este idioma no está en la malla curricular y muchos estamos sin trabajo y tengo que estar pendiente de estos anuncios para conseguir trabajo”, afirmó el educador mientras observa los avisos que se exhiben en las fotocopiadoras y librerías que están en cercanías de la Dirección Departamental de Educación de La Paz en la avenida Illimani.
Flores relata que egresó de la Escuela Superior de Formación de Maestros de El Alto en 2011 y que pese a sus capacitaciones y su participación en compulsas nunca pudo enseñar en colegios públicos de forma estable, ya que asevera que los “privilegiados” para ocupar cargos en los centros educativos son los profesores antiguos o amigos de autoridades con cargos jerárquicos.
“No me dan la oportunidad. Sólo este año he participado en cinco compulsas para la materia de Idioma y Lenguaje, pero siempre me ponen trabas. A los nuevos nos usan para que ganen los (docentes) antiguos o que tienen amiguitos. Ya estoy cansado, ojalá esta pesadilla se acabe”, lamentó.
De acuerdo a la estimación del educador, en el país hay alrededor de 10 mil docentes desocupados.
Los interinatos no son bien remunerados o se pagan después de dos años. Según el profesor ni siquiera las suplencias están garantizadas, ya que muchas veces se quedan sin pago o deben hacer trámites para que se les pague el sueldo y eso demora hasta dos años.
Pero antes de conseguir el interinato, el docente debe “competir” con otro colega que está en la misma situación y dice que es ahí donde comienza el calvario para estos profesionales, ya que los gastos deben correr de su bolsillo. Primero deben llamar a los maestros que están buscando suplencia, luego ir hasta el colegio que a veces está en lugares alejados de la ciudad, además de pasar algunas pruebas, y si son aceptados deben costearse todo el pasaje, almuerzo y otros aspectos mientras dure la suplencia.
“Hasta eso no es fácil, tenemos que hacer llamadas a los profes que buscan interinos, a veces el gasto es insulso y para que nos paguen los trámites son muy burocráticos. La educación en el país es una lágrima”, afirmó.
Optan por otras actividades
Marlene Ch. de 28 años, que egresó en 2014 de la Escuela Superior de Formación de Maestros de Santiago de Huata, aseguró sentirse decepcionada de la situación del magisterio porque aún no le dan la oportunidad de ejercer su especialidad de Lenguaje y Comunicación en los colegios públicos, pese a haber participado en varias compulsas por el puesto y tener puntajes altos.
“Hay mucha corrupción en las compulsas, no dan oportunidad a los jóvenes. La realidad es muy triste porque hay colegas que han egresado desde 2010 y aún no ejercen. Por eso pediría a las autoridades que garanticen la transparencia en las compulsas y ya los profesores de más de 60 años deben dar paso a las nuevas generaciones", agregó.
La docente para ganarse el sustento y ante la falta de trabajo tuvo que optar por otras actividades para sustentarse económicamente y fue sí que trabajó de consultora en línea, facilitadora comunitaria, entre otras actividad y otros de su colegas incluso deben dedicarse al comercio informal para subsistir.
Pese a que el Ministerio de Educación en el último año creo varios ítems para docentes del país, los educadores sin plaza fija creen que estos espacios están destinados sólo para algunos con favoritismos o los más antiguos, por lo que piden a las autoridades reflexionar sobre la educación a nivel nacional y dar más y mejores oportunidades.
Los docentes entrevistados coinciden en que este 6 de junio, que se conmemora el Día del Maestro, no tienen nada que celebrar porque están sin empleo y no se los valora en su especialidad.
Datos
De acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) en Bolivia existen 179.689 profesionales de la enseñanza y la mayoría está constituida por mujeres. Respecto a los salarios del sector público y privado de educación, en los últimos tres años la remuneración media nominal del sector público de educación subió de Bs 4.382 a Bs 4.631, en tanto que en el sector privado subió de Bs 4.689 a Bs 5.254; y de ellos los gerentes y administradores del sector privado son los grupos que perciben mayor remuneración.
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