Conferencia Episcopal expresa voluntad de retomar diálogo "sereno" con el Gobierno

La Paz, 17 de agosto (ANF).- El secretario ejecutivo de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB),  monseñor Aurelio Pesoa, expresó este jueves la voluntad de la iglesia de abrir un canal de diálogo fraterno y sereno con el Gobierno.

“Nosotros hemos pedido tener un canal de acercamiento, probamente no se podrá directamente con el señor Presidente (Evo Morales). Él tiene muchas cosas que hacer.  Pero quisiéramos tener un canal de diálogo, no de dos entidades que se enfrentan, sino para dialogar, buscar y cultivar el bien común”, señaló.

Pesoa remarcó que las relaciones en este momento con el Gobierno no están rotas, sino distanciadas que deben ser trabajadas para mejorar la comunicación entre las dos instituciones.

“No hay una ruptura en las relaciones, solo estamos distanciados y eso se debe acortar. Esperamos que sea así para tener una comunicación amena, fraterna, y serena. Ojalá con el tiempo se pudiera entender, ahora no nos estamos entendiendo”, agregó.

Recordó que la época donde existió un buen nivel de comunicación con las autoridades nacionales fue antes de la llegada del papa Francisco a Bolivia en 2015.

“El tiempo donde tuvimos una relación más fluida (con el Gobierno) fue antes de la visita del papa Francisco. Para nosotros fue esperanza para conocernos, porque quizá no nos conocemos lo suficiente y en ese tiempo hemos tenido bastantes reuniones. Hemos buscado en diferentes oportunidades el poder tener un diálogo, pero no se ha podido”, dijo.

En los últimos días, la Iglesia reprochó la actitud de Gobierno al promulgar la Ley 266 que anula la intangibilidad del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) y da paso a la construcción de la carretera Villa Tunari - San Ignacio de Moxos.

Los religiosos reiteraron este jueves en una rueda de prensa que esa norma dará lugar a la colonización dentro de la reserva natural.

En un pronunciamiento que emitieron señalaron que la construcción de una carretera por el medio del área protegida responde a intereses externos y no así a las necesidades de las comunidades originarias.

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