La
Paz, 11 de octubre (ANF).- El diputado opositor Amilkar Barral pidió la renuncia de la directora general de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero
(ASFI), Lenny Valdivia, y de la gerenta general del Banco Unión, María del
Carmen Villarroel, por el desfalco de al menos Bs 37,6 millones que
sufrió la entidad bancaria.
El legislador envió dos cartas a las mencionadas funcionarias en las que expone una serie de argumentos que apuntan a responsabilizarlas por su falta de control al banco boliviano que fue desfalcado por sus propios funcionarios, 11 de los cuales actualmente están aprehendidos.
“En mi calidad de autoridad nacional democráticamente electa, por ÉTICA Y MORAL pido su renuncia inmediata al cargo de Gerente General del Banco Unión al haber incumplido con sus deberes encomendados”, señala la nota que envió a Villarroel.
Barral señaló que el desfalco es el resultado de la falta de supervisión de los sistemas de seguridad en el manejo de los recursos al interior de la entidad financiera, responsabilidad que, según el diputado, no habría cumplido Villarroel.
“Derivado de su incompetencia se tiene como secuela la afectación millonaria en el patrimonio de todos los bolivianos, tanto de particulares como de los contribuyentes pasivos”, se lee en la carta a Villarroel.
En la nota enviada a Valdivia, Barral citó el artículo 17 de la Ley de Servicios Financieros para evidenciar la responsabilidad que habría incumplido la funcionaria al momento de supervisar al Banco Unión y a la financiera Prodem, que también sufrió el desfalco de Bs 230.000 y $us 9.000 por un funcionario.
“Clara muestra de su falta de compromiso y cumplimiento de sus deberes, son los desfalcos suscitados a dos entidades financieras (…) denotando su falta de acción en cuanto al control y la respectiva supervisión de los sistemas de seguridad en cuanto al manejo de dinero en Entidades Financieras”, señala Barral.
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