250 extrabajadores restan por cobrar su finiquito. Foto: ministerio de Trabajo
La Paz, 29 de mayo (ANF).- Mientras 670 extrabajadores de la empresa Enatex han cobrado sus finiquitos en el ministerio de Trabajo; un grupo menor continúa con sus medidas de presión, entre ellas una huelga de hambre, para que se abrogue el Decreto Supremo 2765 por el que la empresa textil dejó de operar. Acusan al Gobierno de aplicar “un segundo (D.S.) 21060”.
El dirigente de los extrabajadores René Ticona reconoció que la decisión de sus compañeros en cobrar sus finiquitos afecta en el movimiento que sigue impulsando -otro grupo- en defensa de las fuentes laborales.
Asemejó la medida con el Decreto Supremo 21060 del gobierno de Víctor Paz Estensoro, por el que miles de trabajadores quedaron en las calles engrosando filas de desempleados. “Hay un tema de fondo, que un segundo 21060 nos están aplicando que no podemos proteger nuestras fuentes laborales, la estabilidad laboral y el derecho al trabajo”, reprochó el trabajador.
Recordó a la administración del gobierno de Evo Morales que los trabajadores fabriles apoyaron el denominado proceso de cambio, pero lamentó que ahora con medidas de gobiernos del pasado de la “derecha” dejen a cientos de trabajadores sin empleo.
“Nosotros siempre apoyamos y apostamos por el proceso de cambio, pensamos que era un gobierno de izquierda pero nos demuestran lo contrario, porque son de derecha. El sector fabril siempre ha sido el más golpeado”, afirmó Ticona.
El dirigente precisó que desde la creación de la empresa 1.700 trabajadores se quedaron sin fuentes laborales, el mayor problema se generó cuando se empezaron a perder los mercados internacionales para el producto boliviano textil. Paulatinamente desde 2014 cientos de trabajadores que sedaron sin empleo.
El representante dijo que el problema no se termina con el cierre de una empresa, porque otras empresas pueden correr el mismo destino ser cerradas sin mayor explicación vulnerando los derechos de los ciudadanos que tienen derecho a una fuente laboral.
Advirtió que con estas medidas también se matan los derechos sindicales, se vulnera el fuero sindical, en medio de una mirada pasiva y contradictoria del ministerio de Trabajo que no vela por las fuentes laborales ni por los derechos de los trabajadores.
Ticona dijo que no desistirán de sus medidas de presión con el apoyo de la Central Obrera Boliviana.
/NVG