La Paz, 18 abr (ANF).- Con una inversión de 390 a 450 millones de dólares, en una década se proveería energía a 2 millones de habitantes del área rural del país, recurriendo a fuentes alternativas.
Las energías renovables a las que el país debe emplear son sistemas fotovoltaicos para electrificación, microcentrales hidroeléctricas, sistemas termosolares, secadores solares y aerogeneradores, entre otros.
El planteamiento es parte del estudio “rol e impacto socioeconómico de las energías renovables en el área rural de Bolivia”, elaborado por Miguel Fernández para el Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA).
“Se puede afirmar que el desafío para las energías renovables consiste en abastecer con energía a casi 2 millones de personas en los próximos años”, asegura el investigador.
“De esta forma, la necesidad de impulsar los usos productivos de la energía y de fortalecer los servicios sociales y comunales únicamente será posible si existe un suministro confiable, seguro y económico de la energía”, remarca.
En ese marco, y “sólo así la energía se convertirá en un factor que genere desarrollo”, señala la investigación al indicar que las inversiones servirían “para atender la demanda energética rural aislada de aproximadamente 300.000 hogares, con energías renovables”. //JTI//