La Paz, 5 Nov. (ANF).- El ministro de Economía Luis Arce Catacora, reveló que la política de importación de alimentos como la papa, el tomate, harina y otros, generó una “deflación” a noviembre de este año, por lo que, señaló, se logró controlar la inflación.
La deflación es el fenómeno contrario a la inflación y consiste en la caída generalizada del nivel de los precios de bienes y servicios que conforman la canasta familiar.
Explicó que el último dato que dio el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), refleja una inflación del 0,03 por ciento, es decir, una estabilidad con 0 por ciento de incremento en los precios en productos como la papa, tomate, harina, frutas, azúcar y otros.
“Se adoptó medidas, se bajaron los niveles arancelarios para la importación de papa, tomate (y) mejoramos los canales de la introducción de varios productos, había una suerte de burocracia que impedía que se agilice la importación de estos productos, con la Aduana Nacional tomamos medidas”, sostuvo en entrevista a varios medios locales de televisión.
Otras de las medidas tienen que ver con la instrucción que se dio al Banco Central de Bolivia (BCB) para el retiro de más de 2 mil millones de bolivianos, con la finalidad de controlar el circulante.
A la par dijo que se superaron los problemas que se presentó en varias regiones del país por los fenómenos naturales como las heladas y sequias que afectaron la producción, pero que pasados esos problemas se experimentó la caída de los precios en ciudades como Cochabamba, Tarija, Santa Cruz.
“Eso demuestra que está controlada la inflación y tenemos deflación 0 que nos da una mayor tranquilidad”, sostuvo.
En diez meses de este año las exportaciones aumentaron en seis por ciento, en tanto que las importaciones crecieron en doce por ciento, de acuerdo con los reportes del Instituto Nacional de Estadística (INE).
El país exportó por un valor de 10.077 millones de dólares y compró productos extranjeros por 7.471 millones. El gas natural continuó como el mayor producto vendido, los minerales seguían cayendo y los alimentos se recuperaban, la venta de azúcar duplicó su valor.
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