La Paz, 11 de julio (ANF).-"Tú eres la
patria de toda mi ilusión, el que no respete, le parto el corazón” -pero
termina con el decir- “Como me la pinten, yo le brinco este son, Y al
son que me toquen, yo bailo esa canción”. -Yo espero aportar esto con
nuestra música, que no sea nada mas revolución a lo pendejo como decimos
aquí en mi tierra, canta y explica Lila Down en la entrevista exclusiva
que realizó desde su México natal con ANF.
La cantante y antropóloga oxaqueña revivió esos
pasajes de la canción ‘La Patria Madrina’ de su último disco ‘Balas y
Chocolate’ haciendo referencia a la lucha política latinoamericana,
consultada sobre el aporte de la música en la situación que vive el
pueblo mexicano por la llamada guerra contra el narcotráfico y la
corrupción gubernamental.
“La canción expresa nuestro carácter, que es tan
particular, que de cierta forma somos guerreros y queremos la justicia,
no nos dejamos, no dejamos que nos manipulen pero al mismo tiempo
queremos armonía y queremos dignidad”, señaló Ana Lila Downs Sanchez que
con 46 años llega por vez primera a Bolivia y dará un concierto el
próximo 27 de agosto, a las 20.00 en el Teatro al Aire Libre ‘Jaime
Laredo’ de La Paz. Las entradas se pondrán a la venta dentro de dos
semanas, confirmó Jean Claude Eiffel de de la productora Sonidos del
Mundo.
Con mucha emoción por llegar al país, Lila Downs
indicó que al principio estaba un poco preocupada por que su esposo y
director artístico, el jazzista Paul Cohen tiene un malestar de corazón,
pero ahora que aguarda ansiosa su paso por Bolivia se siente mucho más
tranquila.
“La música de los Kjarkas es lo que viene a mí al
pensar en Bolivia, lo escuche cuando era muy jovencita. Escuché muchas
canciones bolivianas clásicas, que marcan un poco esta idea de la
comunidad. Hay elementos de la belleza del mundo indígena en sus
composiciones. Me gusta mucho toda la música del canto nuevo de la época
de los ‘60 y ‘70s”, explica Downs que después de estudiar antropología y
debido a su ascendencia norteamericana por padre estuvo siempre
cruzando la frontera de Minessota a Oxaca y viceversa donde se empapó
del mestizaje que lleva como bandera.
Bolivia será parte de la quinta gira mundial de la
cantante, que promociona el disco ‘Balas y Chocolate’ que como relata
Downs tiene una fuerte influencia de la muerte como un ritual, de la
relación de las costumbres mexicanas con respecto a la muerte.
La oxaqueña lanzó su primer disco a mediados de la
década de los ’90 pero se encontró con el reconocimiento internacional
gracias a su participación en la banda sonora de la película Frida, en
el 2002, por la que estuvo nominada al Oscar. En 2006, durante su concierto de despedida, Chavela Vargas la declaró su sucesora.
Con una base entre militancia indígena y orgullo
mestizo Lila Downs se ha vuelto una representante de un movimiento
mundial que reivindican las raíces de los pueblos nativos, su repertorio
incluye canciones tradicionales hispanoamericanas y música negra
estadounidense: corridos, rancheras, cumbias, boleros, jazz, hip hop
además de que su manera de cantar tiene una ductilidad increíble.
“Creo que en estos años he intentado elevar temas
que deben ser parte de nuestra cotidianidad, en nuestra música”, relata
Down sobre esta idea de mestizaje sonoro y a la vez como una postura
política en sus canciones no solo en los ritmos sino también en las
liricas.
“Son las mujeres que muelen tortillas (productos
del maíz en Mexico), las personas que producen el Cacao, un elemento
sagrado para el ritual de la ofrenda de los muertos. Son los productores
del mezcal. Así se visualiza nuestro país. Hay muchos elementos
culturales que me gusta resaltar, porque creo que hace falta para darlo a
conocer, para ponerlo en la mesa, y discutirlo me encanta y aprendo mas
sobre tema”, indica Lila Downs como un ejemplo de esta búsqueda como
una postura artística.
Consultada sobre la manera de reinventarse para
seguir siendo original en estos más de 20 años de carrera Downs señaló
que “es como ser madre, soy madre de un niño de 5 años” es importante
aconsejar a los músicos que la acompañan siempre dejándoles la libertad
de expresarse.
“Fíjate ha sido un aprendizaje interesante ya que
al principio, cuando era más joven sin experiencia, al dedicarme a vivir
de la música creo que pensaba que yo tenía que dirigir todo – aunque
lo sigo haciendo – pero de una manera muy distinta. Antes cada
elemento tenía que estar en su lugar pero ahora me di cuenta que al
darles la libertad a los músicos para que ellos se expresen de la manera
en que ellos sienten es mucho mejor manera de trabajar”, explicó.
Down añadió: “Yo entro a decir: tu eres fuerte en
este estilo, a hacer sugerencias que si vienen con la experiencia pero
dejarlos más libres es una manera de dirigir donde se consigue mas
belleza y mas autenticidad”.
La cantante indicó que ahora ella guía a sus
músicos un poco en las cosas importantes para que ellos mismos
desarrollen su personalidad propia musical.
Balas y Chocolates, su última producción es una oda
a la muerte, como lo explicamos en las líneas anteriores, Downs señala
que en el disco ha trabajado varios géneros musicales de Latinoamérica:
“Dulce veneno está inspirada por la milonga que
aunque lo produjo un cubano tiene tintes de danzonete además en letra
hacemos una crítica social sobre los videos del reggueton donde se ve a
mujeres encuaeradas en una posición que yo considero fea. Estos videos
nos denigran a las mujeres”, explicó.
En el disco también hay un tema dedicado al Cacao,
“elemento muy importante en la ofrenda de los muertos, el disco está
dedicado al día de los muertos, por eso que temas diferentes aluden a la
Parca”, señaló. También hay otros temas en jaronchos, también en la
polca y la música norteña.
Para finalizar Lila Down – que no para de crear y
producir desde 1994 – comentó que está trabajando en su próximo disco
donde se inclina por los boleros:
“Hace tiempo queremos hace un disco de boleros y en
esas andamos, buscando boleros de diferentes lugares que nos motiven y
cantarlos un tiempo para ver si se halla con nosotros”, señaló.
(MJF)