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Cuatro recomendaciones para tener mente sana y cuerpo sano

Entrenar la memoria, dormir bien, una buena alimentación combinada con deporte y otras prácticas saludables hacen posible mejorar nuestra salud física y mental.
2 de Octubre, 2017
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Foto: Internet
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La Paz, 2 de octubre (Agencia de Noticias para el Desarrollo, AND).- Cuidar tanto el cuerpo como la mente cobra cada vez más importancia en la actualidad. Existe una frase de origen romano “Orandum est ut sit mens sana in corpore sano”, que significa “se debe orar que se nos conceda una mente sana y un cuerpo sano”, aunque ahora se la utiliza en otro sentido: “Hay que cuidar la mente y el cuerpo”.

Independientemente que la frase se utilice en su sentido original, a continuación veremos cuatro recomendaciones que ayudarán a quien las ponga en práctica.

La memoria

Uno de los males más tristemente conocidos es el Alzheimer, enfermedad degenerativa del cerebro que hace que se borren paulatinamente los recuerdos del paciente. No se conoce aún una cura para esta enfermedad, pero se sabe que determinados comportamientos ayudan a retrasar su progreso, como por ejemplo entrenar la memoria con juegos.

Los juegos tienen la facultad de activar simultáneamente diferentes partes del cerebro, puesto que requieren ejercicios de concentración, habilidad, velocidad y, por supuesto, memoria.

Dormir bien

Padecer insomnio es desesperante. Esa situación de tener que dormir en las pocas horas que tenemos disponibles, porque al día siguiente hay que ir a trabajar o a estudiar, y no poder conciliar el sueño, saca de quicio al más templado.

Pero hay trucos y remedios que no se ciñen solamente a tomar somníferos. En esta web puedes leer algunos de ellos.

Hay quienes recomiendan no quedarse en la cama si no se puede dormir, pero también hay quienes piensan que permanecer en reposo con los ojos cerrados, aunque no se esté profundamente dormido, ayuda al descanso del cerebro y del cuerpo y, con un poco de suerte, puede conseguir incluso alcanzar el sueño.

La alimentación y el deporte

El cuerpo es una máquina bioquímica. Funciona como una fórmula química compuesta por millones de procesos simultáneos e interconectados. En palabras más sencillas, todo lo que hacemos influye para bien o para mal en nuestro cuerpo. Tal y como indica la revista Mindfit.club, comer bien y hacer deporte influye muy positivamente en la salud de nuestro cuerpo.

Es importante hacer dietas que se adecúen a las necesidades calóricas del cuerpo. No es lo mismo desempeñar un trabajo en el que se haga un gran esfuerzo físico que otro en el que se esté permanentemente sentado frente a la pantalla de un ordenador. Uno requerirá una dieta muy alta en proteínas y el otro una dieta muy baja en grasas. Saberlo y practicarlo hará que nuestro cuerpo funcione mejor.

A la hora de cocinar es importante elegir bien los ingredientes y los accesorios de cocina. En esta página comparativa se habla por ejemplo de los distintos tipos de batidoras que hay. Pero también influyen los recipientes. No es lo mismo cocinar en ollas, sartenes o woks. El calor se distribuye de forma distinta y hace que los alimentos se cocinen también de forma distinta.

Prácticas básicas

Cuidar la mente y el cuerpo requiere algo de suerte, pero también algo de ingenio y voluntad. Suerte porque no es lo mismo nacer en una ciudad, capital de un país, que nacer en una aldea en medio de la selva. Cada lugar tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Ingenio porque hay que saber reaccionar en función de lo que el cuerpo nos indica. Para esto es necesario también algo básico: prestarle atención al cuerpo.

Siempre que sea posible hay que intentar hacer feliz al cuerpo y darle lo que pide. Además hay que hacerlo con mesura, evitando los excesos. Dice un dicho que el agua, que normalmente es beneficiosa en todo, puede ahogarte si hay demasiada. Lo cual ilustra que hasta lo más inocuo puede llegar a ser perjudicial utilizado en exceso.

Y, por supuesto, hay que mantener la mente sana. Dice otro dicho que si no está roto, no lo arregles. Lo cual quiere decir, entre otros significados, que las preocupaciones por el futuro es mejor dejarlas para el futuro y es mucho más beneficioso atender a las inmediatas. Es más fácil decirlo que hacerlo, pero con un poco de práctica se puede conseguir.

/Agencia de noticias Para el Desarrollo/

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    Mente sana en cuerpo sano